La Monumental de Frascuelo acogía, este 18 de junio, la segunda corrida de toros de su Feria con un mano a mano entre el torero de la tierra por excelencia, El Fandi, y una figura de época, El Juli. Se lidiaban toros de Garcigrande, Santiago Domecq y Victoriano del Río.
Juli, toque suave y trazo lento ante la falta de fuerza del primero de Victoriano del Río
Poca duración atisbó en los primeros tercios el primero de la tarde, un animal al que bien administró la embestida El Juli de capote y en el caballo, al igual que posteriormente sus hombres de plata en banderillas. Animal que tenía nobleza y humillación, pero al que le faltaba fuerza. Toque suave, trazo templado y tiempos ecuánimes fueron los ingredientes fundamentales de Juli para hacer obedecer al de Victoriano del Río, evitando en todo momento que perdiese las manos el astado de Guadalix. A sones de Gallito afrontó la segunda parte del trasteo Julián, que sólo pudo seguir tratando con toque suave al animal. Fue silenciado tras un pinchazo y una estocada.
La alegría de Fandi, oreja del segundo de Santiago Domecq
De Santiago Domecq era el bonito segundo, animal con el que ya dio fiesta El Fandi para saludarlo, recibiéndolo con dos largas cambiadas de rodillas, toreándolo ya erguido a la verónica y rematando por revolera. Por chicuelinas, una de ellas muy ajustada, y una media abelmontada quitó el gran capote de David, que banderilleó con la soltura que tiene acostumbrada a la afición al de Santiago. El animal tuvo buenas condiciones, aunque no la duración necesaria como para que la obra de David fuese más larga. Por ambos lados lo pasaportó el granadino, tirando en el último tramo de la faena de toreo de cara al tendido. Tras estoquearlo, paseó una oreja.
Juli pincha una obra excelsa al tercero de Santiago Domecq
También de Santiago Domecq era el tercero, segundo del lote de El Juli, al que llevó embebido en su capote a placer el madrileño. Al relance entró al caballo el astado, que se llevó un mero doble picotazo por lo complicado a la hora de entrarlo al jaco. Y con la chispa que esta ganadería viene demostrando en los últimos tiempos, el toro mantuvo la duración en las telas de Juli, que atemperó su tranco y sometió por abajo al de Santiago. Por la derecha dejó momentos de toreo relajado y con el hombro hundido. La pena fue el mal uso del acero, ya que pinchó hasta en tres ocasiones al animal y perdió toda posibilidad de premio. Fue ovacionado.
Fandi, otra oreja del duradero cuarto
El burraco cuarto, otro animal de buena presencia, tuvo la gran virtud de la duración: le aguantó la lidia de Fandi de principio a fin. Y eso que le dio capa y le hizo desplazarse en banderillas, pero el fondo del astado de Guadalix era mucho, y aunque no terminó de romper en calidad suprema, su nobleza sí le permitió a Fandi argumentar una faena muy en su estilo. Mató de una estocada entera y paseó la segunda oreja de su tarde.
El Juli pasea las orejas del quinto de Garcigrande
Al quinto, de Garcigrande, le paseó las orejas El Juli. Fue un animal al que fue imponiéndose desde que salió Julián: bien hecho, armónico y con trapío para una plaza como la Monumental de Frascuelo, tenía las teclas que supo tocar Julián a base de trazo limpio y cabeza a la hora de proponer y no asfixiar al animal. Le dio tiempos al enrazado astado charro y logró imponerse en las series en redondo al castaño, paseando finalmente las orejas tas la estocada.
El Fandi, otra oreja en el sexto
De nuevo variado fue el saludo capotero de Fandi al sexto: largas cambiadas de rodillas, chicuelinas de inicio y verónicas para rematar airoso con una media y una revolera. La plaza, entregada a su paisano. Como también lo estuvo en el tercio de banderillas y en el inicio de faena, esperando al animal en el centro del anillo de rodillas para torear de hinojos en redondo.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros Monumental de Frascuelo, Granada. Segunda de feria. Corrida de toros. Más de tres cuartos de entrada del aforo permitido.
Toros de Victoriano del Río -primero y cuarto-, Santiago Domecq -segundo y tercero-, Garcigrande -quinto- y Domingo Hernández -sexto-.
El Juli, silencio, ovación y dos orejas.
El Fandi, oreja, oreja y oreja.
FOTOS: MIKA ZARCAS