TEXTO: JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO
El Fandi, López Simón y Pablo Aguado trenzaban el paseíllo en la tarde de este domingo en Madrid en el cierre de la Feria de San Isidro. Se lidiaba un encierro de Santiago Domecq para el festejo.
“Tomillito”, un colorado chorreado, con un peso de 602 kilos era el primero de la tarde: gran facilidad capotera mostró Fandi en el saludo, quitando luego López Simón por gaoneras y respondiendo por chicuelinas David, haciéndose un auto-quite en un momento de compromiso. Pleno estuvo en el tercio de banderillas, mostrando la fácil dificultad de este arte palitroques en mano. Al público fue el brindis del granadino, que comenzó en los medios su faena de rodillas, dejando un muletazo plenamente completo que llegó con mucha fuerza al tendido. A partir de ese momento, el trasteo anduvo en altibajos con un animal enclasado, con movilidad y fondo que finalmente fue ovacionado en el arrastre. Sardo era el cuarto del festejo, segundo del lote de Fandi, animal que no dijo tanto como sus hermanos anteriores en la muleta de Fandi y ante el que el granadino fue de nuevo silenciado.
Emocionantísimo fue el tercio de varas del sexto, arrancándose con pleno galope y empleándose hasta el final el animal en el caballo de Manuel José Bernal. Además, Fandi combinó con variedad el momento, en el que se le dieron tres puyazos. Pleno de conexión fue el tercio de banderillas de Fandi, dándole sus tiempos, aprovechando la movilidad del animal y llegando con muchísima fuerza al tendido. Un espectáculo. De rodillas comenzó su faena, pero se desfondó totalmente la condición del animal.
Instinto manso tenía el segundo ya en los primeros compases de la lidia, un animal que López Simón brindó a sus compañeros heridos en la feria. Ya en la primera tanda por la derecha demostró la repetición que tenía el animal, un toro con máxima movilidad y que quería seguir la muleta y al que el diestro de Barajas intentó componerle tandas en redondo. Faena que se fue diluyendo también y no caló en el tendido en los últimos compases, matando de feísimo bajonado en metisaca y de una estocada a la segunda de la que salió con un golpe en la zona del muslo. Fue silenciado el torero con otro toro fuertemente ovacionado en el arrastre. Palmas tras aviso.
Algunos detalles capoteros a la verónica dejó Pablo Aguado frente al tercero, un animal al que le sopló un soberano inicio de faena con momentos gustosísimos. Por la mano derecha fue la siguiente serie, pero el toro ya no era el mismo que los primeros tercios, pues ya se iba poco a poco aplomando. Aprovechó la inercia del animal con la zurda para llegar arriba, pero el toro iba claramente a menos. Pareció reponerse el animal para el final de la faena, en la que selló de nuevo el sevillano momentos de plena gracia, finiquitando a pies juntos por la mano izquierda. A la hora de entrar a matar, sufrió una aparatosa cogida por el toro, que lo prendió en la suerte suprema a la altura del muslo, por donde se le veía sangre. Desafortunadamente marró con el descabello. Ovación tras dos avisos.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Última de la feria de San Isidro. Corrida de toros. No hay billetes.
Toros de Santiago Domecq.
El Fandi, división, silencio y silencio en el que mató por Aguado.
López Simón, división tras aviso y silencio.
Pablo Aguado, ovación tras dos avisos y herido.