JAÉN

Faenón de un Simón, de nuevo, en tarde sin espada


domingo 18 octubre, 2015

Entretenido mano a mano en el que desorejó a ese segundo; Fandi fue todo voluntad, incluso recibiendo al peligroso quinto en toriles, pero no tuvo lote propicio

Entretenido mano a mano en el que desorejó a ese segundo; Fandi fue todo voluntad, incluso recibiendo al peligroso quinto en toriles, pero no tuvo lote propicio

IGNACIO RUBIO

Cerraba la temporada 2015 en España la corrida
de toros de este domingo en Jaén, en la que David Fandila «El Fandi” y Alberto López
Simón se enfrentaban en un mano a mano de postín en la última cita clave de la
temporada 2015. Un encierro de Hermanos García Jiménez y Jandilla.

El primero en saltar al ruedo llevaba el
hierro de la casa: Peña de Francia, propiedad de Matilla. Se estrelló de inicio
contra el burladero y acusó el golpe en la lidia del Fandi. El granadino estuvo
cumplidor y lleno de reservas, con su tradicional tercio de banderillas y una faena
corta llena de exposición. Llegó lo mejor en una serie en redondo y la brevedad
con la espada. Saludó una ovación desde el tercio con escasa petición de oreja.

Feo de salida fue el segundo de Jandilla, al
que Simón le enjaretó un ramillete de verónicas ganando terreno y descalzo por el estado del ruedo. Borrachera
de arte desde la segunda serie por naturales fue lo que dejó Simón, muy de
verdad con largos y llenos muletazos. Se emborrachó Simón a diestras con
ligazón, gusto y quietud. Abrochó con molinetes abrochados, pases de la firma y
una verdad de las que emocionan. Se pidió el indulto del toro. Tras pinchazo,
cortó las dos orejas.

Enrabietado por la borrachera de toreo de
Simón salió Fandi a por el cuarto. David lo recibió con dos largas en el tercio
y su toreo característico a la verónica para hacer un quite por lopecinas y
chicuelinas. Brindó al respetable jiennense y dejó una faena muy aseada por
ambos pitones, mejor al natural, buscando David la enjundia. Finalizó rodilla
en tierra y pasando el animal una y otra vez hasta su dominio y aburrimiento,
en desplantes con la complicidad del tendido. Un cañón de artillería fue con la
espada, para pasear la oreja con fuerte petición de la segunda no atendida.

Otra faena de cante grande fue la del cuarto,
en la que Simón perdió por la espada y los dos pinchazos toda posibilidad de
premio. Al natural brilló como la luz de
la plaza, algo que también hizo a diestras y en redondo, arrancando los olés
con una fuerza increíble en Jaén. Se lo pasó por detrás y los de pecho fueron
de pitón a rabo. Estuvo el público expectante para empujar la espada que no
entró hasta la tercera, dejando el premio en una ovación atronadora.

Fandi se fue a portagayola para recibir al
gordo quinto de El Pilar, último toro de su temporada española. Era un mulo de
600 kilos al que le ofreció otras dos largas en el tercio y su repertorio en
banderillas. Brindó de forma emotiva a Alberto López Simón, en un discurso
largo y de buena escuela, lleno de complicidad. Fue una faena imposible ante un
astado peligroso al que pasaportó de forma digna. Escuchó leve petición.

 

Inédito quedó Simón en el recibo capotero del
sexto, justo cuando empezaban a caer unas tímidas gotas en el saludo al de
García Jiménez.
De nuevo la
espada se llevó otro triunfo forjado a ley con un toro cornivuelto que aunque
no tuvo excesiva clase si valió para un toreo franco y lleno de verdad. Le
faltó la espada a Simón.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Jaén. Segunda de la Feria de
San Lucas. Corrida de toros.

Toros de El Pilar, Hermanos
García Jiménez y Jandilla.

David
Fandila «El Fandi”, ovación, oreja y 

Alberto
López Simón, dos orejas, ovación y palmas.