La plaza de toros de Almendralejo acogía un festejo en el que reaparecía por un día el extremeño Luis Reina, junto a el los también extremeños Alejandro Talavante y Emilio de Justo. Una corrida de Juan Pedro Domecq esperaba en los corrales para una tarde muy especial organizada por la empresa Tauroemoción.
Gran ambiente despertó la reaparición de Luis Reina en una plaza que registró un lleno en sus tendidos. Se gustó Reina en el recibo de capa al primero de la tarde, un animal bajo y abrochado de cuerna. Con la muleta dejó una faena templada por ambas manos donde intentó conducir la nobleza del astado sevillano. Pese a tener que usar el descabello se premió su labor con las dos orejas.
El segundo de la tarde nos deparó una faena templada y muy asentada de Alejandro Talavante ante un segundo con nobleza pero medido de raza. Alejandro soltó muñecas ya con el capote en un recibo muy jaleado por la parroquia extremeña antes de brindar su faena a Luis Reina. Con la muleta dibujó naturales largos y templados ante un toro al que le costaba ir sometido. A derechas también dejó tandas con su sello personal en un trasteo muy asentado que de no ser por el mal uso de la espada hubiera acabado en triunfo.
Lo dio todo Emilio de Justo en el tercero de la tarde, un animal con el que dibujó templados lances a la verónica para más tarde dibujar muletazos marca de la casa por ambas manos. Una faena que brindó a su paisano antes de bordar el toreo con la mano zurda. Con la mano derecha también dejó muletazos cadenciosos y con la figura muy asentada. Tras una estocada y dos descabellos paseó el doble trofeo.
Emotiva fue la faena de Luis Reina al que hizo cuarto, una faena marcada por el buen gusto pero en la que molestó bastante el viento. Brindó la faena a su hijo del mismo nombre antes de de dejar una faena basada en la mano derecha. Reina le buscó las vueltas al animal con un público entregado a la causa. Tras pinchazo y estocada paseó el doble trofeo de un toro con nobleza pero al que le faltó mayor entrega.
Volvió a sentirse Talavante con la capa en este quinto de la tarde, otro animal con nobleza del hierro sevillano de Juan Pedro Domecq. El extremeño cuajó por ambas manos al interesante animal en una faena de guante de seda. Alejandro acarició las embestidas de un astado que fue a más durante la lidia. Talavante volvió a recordar a ese Talavante de 2018 en una labor de fino trazo donde siempre buscó darle al animal aquello que pedía. Un toro de gran clase y entrega al que se le pidió la vuelta al ruedo en el arrastre.
Le volvió a cortar las dos orejas De Justo al animal que cerraba plaza, un astado también con nobleza y buen embroque, pero al que le faltaron finales. Cuidó al animal en los primeros tercios para luego apretarle en una faena interesante donde dejó pasajes de su personal concepto. Emilio llevó siempre empapado en la pañosa a un astado que pese a no humillar mucho si tuvo temple y cierta clase. Tras pasaportarlo le fueron concedidas las dos orejas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Almendralejo. Lleno en los tendidos.
Toros de Juan Pedro Domecq. Correctos de presentación y de interesante juego en lineas generales. Destacó el bravo y enclasado quinto.
Luis Reina: Dos orejas y dos orejas
Alejandro Talavante: Saludos desde el tercio y dos orejas y rabo
Emilio de Justo: Dos orejas y dos orejas
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