MÉXICO

Israel Téllez y Guillermo Hermoso, a hombros en Moroleón


lunes 20 noviembre, 2023

Se lidiaron toros de San Pablo y Bernaldo de Quirós para rejones y Pepe Garfias

Sin Título
Foto: Méndez

Ante media entrada en el coso techado “Alma Barragán” de Moroleón, Gto., en tarde de agradable clima, se dio la corrida de toros en el marco de las fiestas por el “Orgullo de ser Moroleonés”, resultando triunfadores el rejoneador ibérico Guillermo Hermoso de Mendoza y el matador Israel Téllez, quienes, de manera equitativa se repartieron cuatro orejas y, por ello, al final, fueron apeados de la plaza, en hombros. El otro espada en el cartel, Octavio García “El Payo”, “anduvo con el santo de espaldas”.

Se lidiaron dos toros de la dehesa jalisciense de San Pablo y de la guanajuatense de Bernaldo de Quirós para rejones, siendo de poca movilidad el primero y regular el segundo. Y, para la lidia ordinaria, se jugaron cuatro astados de la ganadería potosina de José Garfias, siendo regular el primero, complicado el segundo, bueno el tercero y manso con peligro fue el cuarto.

En el toro que abrió el festejo, de San Pablo, al que le pesaron los kilos y tuvo poca movilidad, aunque sí algo de nobleza, el caballero en plaza estellés Guillermo Hermoso de Mendoza colocó de inicio un fierro de castigo. Se lució al clavar banderillas, sobre todo, las que puso al cambio, otra al violín y palos cortos. Sin embargo, el astado no le ayudó mucho para imprimirle más emoción a la faena. No acertó al matar y tuvo silencio tras un aviso.

A pie, el estatal Israel Téllez, a su primero, de José Garfias, lo lanceó con temple y mejor estuvo en un quite por chicuelinas. Se hizo ovacionar al cubrir emotivamente el tercio de banderillas. Con la muleta, tras brindarle a la alcaldesa moroleonesa, Alma Denisse Sánchez Barragán, inició en tablas, de rodillas por alto, para seguir con mucha entrega y disposición, destacando algunos pases por ambos lados y teniendo buenos matices. El toro vino a menos. Más muletazos aislados y detalles toreros, pero, al final, falló con la espada y fue silenciado tras dos recados de la autoridad.

En su primero, de José Garfias y con pocas opciones, además de complicado, el queretano Octavio García “El Payo” le puso empeño con el capote y su labor con la sarga fue igualmente de evidente voluntad, pero, ante la nula colaboración del burel, tuvo que abreviar. Terminó de media estocada y tuvo silencio.

A su segundo, “Alfarero”, de Bernaldo de Quirós, noblote y que duró poco, Guillermo, el torero equitador, le colocó un rejón de castigo, se lució toreando a la grupa y haciendo en tablas emocionantes pasadas por dentro para entonces realizar una buena faena, sobresaliendo sus banderillas al cambio e intercalando balotadas. Puso tres rosas en un palmo de terreno. El astado se vino a menos, pero, el jinete supo aprovechar lo poco que tenía el toro. Dejó el rejón de muerte en buen sitio y, a petición popular, se le otorgaron las orejas.

Téllez en su segundo, “Arandero”, de José Garfias, noble, pero, de poco “motor”, dio un farol de hinojos al hilo de las tablas y, ya de pie, lanceó con esmero a la verónica. Buen puyazo de Mauro Prado. Se lució Israel cubriendo el segundo tercio, sobresaliendo un par al violín. Con la pañosa, supo aprovechar la bondad del astado, para realizar una entusiasta, torera y emotiva faena por ambos lados, además de conectar con el tendido para terminar de estocada bien ejecutada y, ante el contento general, la autoridad le concedió dos apéndices.

Y en el que cerró el festejo, de José Garfias, manso y con peligro, “El Payo” poco pudo hacer, lo intentó con el capote, lo mismo que con la muleta ante la poca opción que le dio su antagonista. Abrevió, falló al matar, dobló el burel, el puntillero lo levantó, terminó por entregarse y todo quedó en pitos tras dos avisos. Mal y de malas el torero.

MOROLEÓN, GUANAJUATO, MÉXICO

Moroleón, Gto.- Plaza «Alberto Balderas». Corrida de toros del «Orgullo de ser moroleonés». Media entrada en tarde agradable.

Toros de San Pablo y Bernaldo de Quirós para rejones (1o. y 4o.) y Pepe Garfias, de buena presencia y juego variado en su conjunto.

El rejoneador Guillermo Hermoso de Mendoza: Ovación tras aviso y dos orejas.

Israel Téllez: Silencio tras dos avisos y dos orejas.

Octavio García «El Payo»: Silencio y silencio tras dos avisos.