MADRID

Jorge Molina saca billete para la final con un enclasado novillo de Monte La Ermita


jueves 27 julio, 2023

Jorge Molina acompañará a Christian Parejo y Alejandro Peñaranda en la final del certamen Cénate Las Ventas tras cuajar una notable faena sin espada a un súper clase de Monte La Ermita, en una interesante novillada en la que Marcos Linares dejó detalles de inteligencia y José María Trigueros derrochó exposición.

18 Jorge Molina

Llegaba la cuarta novillada del Certamen Cénate Las Ventas, ya consolidado en el calendario taurino de Madrid. Esta vez eran Jorge Molina, José María Trigueros y Marcos Linares -los dos últimos se presentaban en Las Ventas- los que se jugaban el pase ante novillos de Monte La Ermita y El Cotillo.

Jorge Molina, silenciado con el blando primero

Ya blandeó el primero de El Cotillo en el saludo capotero de Jorge Molina. Lo administró Teodoro Caballero en varas, antes del quite a la verónica de José María Trigueros, en el que el animal mostró calidad a la hora de tomar la tela. En la brega, lo sostuvo Juan Navazo con mucha eficacia. Se dobló Jorge Molina con él en un inicio de faena en el que el novillo quiso más que pudo. El secreto era encontrar la media altura y llevarlo muy toreado. Lo consiguió en una tanda al natural, en la que dejó los mejores muletazos de la faena. El animal se fue apagando en las postrimerías, perdiendo las manos en varias ocasiones. Se fue a por la espada el toledano en el momento adecuado. Estocada trasera tras pinchazo.

Trigueros sella una labor intermitentemente con el buen segundo

Serio por delante y escurrido de carnes era el segundo de Monte La Ermita, al que José María Trigueros recibió rodilla en tierra en un saludo variado y muy garboso. Gran tercio de varas el que protagonizó Miguel Novoa, que fue derribado en el primero de los tres encuentros y recibió una gran ovación. Empujó con la cara abajo el novillo de Monte La Ermita, que demostró su movilidad y genio también en banderillas. Antes, Macos Linares se había presentado en un arriesgado quite por chicuelinas. Se dobló por abajo el novillero murciano en un inicio de faena algo brusco, al que siguieron dos tandas en las que el animal respondió con brío y bravura. Consiguió encontrar la emoción cuando ligó los primeros muletazos de cada tanda, pero no encontró continuidad en las series. Se fue viniendo a menos el animal, que terminó aburriéndose en una labor que Trigueros remató en cercanías. Estocada atravesada.

Marcos Linares deja detalles de inteligencia con el complicado tercero

Una pintura era el tercero de Monte La Ermita, un novillo sardo con cuajo y serio por delante, que se mostró muy desentendido en los primeros tercios. Ya con la franela, planteó Marcos Linares un inicio inteligente al novillo de su presentación, que tenía mejores inicios que finales. Salía siempre el animal con la cara muy arriba y desentendido. Le cambió los terrenos el de Linares, llevándolo finalmente a la segunda raya, pero no encontró lucimiento ante una embestida muy descompuesta. Buscó la espada para dejar una estocada tendida al segundo intento. Silencio.

Jorge Molina emborrona con la espada una importante faena al gran cuarto

También serio por delante fue el colorado que hizo cuarto, que no apuntó su excelente condición en el capote. Lo vio Jorge Molina, que consiguió entenderlo a la perfección en una faena muy solvente. Le echó la tela muy suave para tirar con suavidad de un animal que hizo gala de una clase suprema por ambos pitones. Templó el toledano las tandas por el derecho, que tuvieron emoción por la gran calidad del astado. Lo mejor llegó al natural, en una serie que caló mucho arriba y en la que siguió respondiendo el animal, que también tuvo fondo. Cerró por manoletinas ajustadas pero todo lo emborronó por el mal uso de los aceros.

Trigueros, voluntarioso con el manso quinto

Muy desentendido de salida fue el quinto, de nombre Melómano, un animal de El Cotillo apretado de carnes que fue protestado en el caballo por su mansedumbre. Trigueros se lo llevó más allá de la segunda raya en el inicio de faena, donde dejó una tanda de interés por el pitón derecho en la que le llevó muy toreado. Se fue viniendo el noble animal a menos, quedándose cada vez más corto en la franela del novillero murciano en una labor que no cogió el vuelo necesario para romper. Enterró una estocada muy trasera.

Marcos Linares, sin opciones con el descastado sexto

Muy rematado fue también el sexto, el animal de Monte La Ermita que cerraba plaza. Le sopló Marcos Linares verónicas de mucho gusto en el saludo, encajadas y de mentón en el pecho. Lo que pareció dibujar el novillo en el saludo se fue diluyendo poco a poco, llegando el animal a la muleta muy reservón. De nuevo, exhibió inteligencia delante del novillo el joven linarense, que poco más pudo hacer en una noche en la que pechó con el peor lote. Enterró el acero al segundo intento.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Las Ventas, Madrid. Certamen de novilladas Cénate Las Ventas, cuarta de abono. Novillada con picadores. Unas 6.000 personas en los tendidos.

Novillos de Monte La Ermita y El Cotillo (primero y quinto), de buena presencia. Tuvo calidad el blando primero, que quiso más que pudo; bravo y encastado fue el segundo, ovacionado en el arrastre; de embestida descompuesta el tercero; de excelente calidad y clase el cuarto, ovacionado en el arrastre; de corto recorrido el manso quinto; muy descastado el sexto.

Jorge Molina: silencio y ovación.

José María Trigueros: ovación y silencio tras aviso.

Marcos Linares: silencio y silencio tras aviso

FOTOGALERÍA: PABLO RAMOS

Fotogaleria Madrid 27 7 2023