DAX (FRANCIA)

Ni Toros ni Salsa en el cierre… sólo Roca Rey


domingo 10 septiembre, 2017

No terminaron de romper los astados de Puerto de San Lorenzo, Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández para el mano a mano entre Enrique Ponce y Andrés Roca Rey, cortando el peruano la única oreja

No terminaron de romper los astados de Puerto de San Lorenzo, Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández para el mano a mano entre Enrique Ponce y Andrés Roca Rey, cortando el peruano la única oreja

EMILIO MÉNDEZ

La corrida de toros con los hieros de Puerto de San Lorenzo, Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández era la que tenía lugar esta tarde para cerrar la Feria de Toros y Salsa de la localidad francesa de Dax. En el cartel, un mano a mano entre Enrique Ponce y Andrés Roca Rey, dos de los toreros de la temporada.

El primero, de Domingo Hernández, fue un toro complicado que en la primera parte le costó embestir al capote de Ponce. Empujó con violencia en el caballo, derrumbando al piquero en la primera de las dos varas. Ponce lo intentó por ambos lados muleta en mano, sin poder cuajarlo por las malas ideas del animal, siempre con la cabeza arriba. La capacidad del diestro salió a relucir para dejar una estocada desprendida. Palmas.

Roca Rey cortó una oreja de su primero, un segundo de El Puerto que fue de menos a más. Comenzó incierto de salida en las verónicas del peruano. Brindó al respetable para realizar una labor de menos a más, con muletazos buenos a diestras. Toreó largo por esa mano, con clase y bajándole la mano de forma relajada al astado salmantino. Tuvo buenos momentos por el lado izquierdo. Tras cambios por la espalda en el epílogo y una estocada caída, paseó premio.

El tercer de la tarde, de Cuvillo, fue un toro que no tuvo mucho recorrido, soso de salida y de final. Dejó capotazos Ponce sin terminar de lucirse. Toro que apenas cumplió en el peto, para que después Roca Rey dejase un quite por chicuelinas ajustadísimas. Dejó una faena en la que el diestro de Chiva lo intentó por ambos lados con mucha calma inteligente. Logró muletazos que no tenía el toro. Al final, dejó estocada desprendida, con un toro que tardó en caer, por lo que recurrió al descabello. Palmas.

El cuarto de la tarde, también de Cuvillo, fue un toro que tuvo nobleza y bravura aunque le faltó ese punto de transmisión. Aun así, Roca Rey pudo dejar buenos capotazos. El toro cumplió en el caballo. Realizó una faena que tuvo momentos buenos, con muletazos largos y profundos pero con altibajos, incluso siendo desarmado. Se puso delante, sin moverse, logrando hierático buenos naturales. Terminó por luquecinas para dejar una estocada caída y ser ovacionado con petición de oreja no concedida por el palco.

El quinto de la tarde, también de Cuvillo, fue un animal con cierta calidad aunque sin transmisión. No se lució Ponce en el capote, hasta tomarle la distancia en faena tras brindis al respetable. Fue de poder y sapiencia el trasteo, que logró dejarle tres primeras tandas con mucha inteligencia. Muletazos de sello propio y poncinas antes de la estocada baja y trasera. Palmas.

El sexto fue un toro de Domingo Hernández rajado, con cierta mansedumbre, al que poco pudo hacer Roca Rey de capote. Algunos muletazos dejó Andrés, ante un toro siempre buscando las tablas. Abrevió, matando de estocada caída siendo silenciado.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Dax, Francia. Tercera de la feria de Toros y Salsa. Corrida de toros. Lleno. 

Toros de Puerto de San Lorenzo, Núñez del Cuvillo y Domingo Hernández.

Enrique Ponce, palmas, palmas y palmas. 

Andrés Roca Rey, oreja, ovación y silencio.