TEXTO: PABLO LÓPEZ RIOBO / FOTOGALERÍA: SARA DE LA FUENTE
La corrida de El Pilar llegaba, en la tarde de este miércoles 18 de abril, a la Real Maestranza de Caballería de Sevilla dentro de su Feria. En el cartel, Juan Bautista, López Simón y José Garrido haciendo el paseíllo a las seis y media en punto de la tarde.
El primero de la tarde llevaba por nombre Potrero, un toro de El Pilar al que Bautista saludó por verónicas. Se le midió en el caballo, dejando posteriormente Bautista y López Simón sendos quites con la premisa del temple. Medido de fuerza estaba este primero al que Bautista toreó por ambos pitones, calando en el tendido cuando los hacía de uno en uno y le perdía unos pasitos. Tuvo clase y nobleza el toro pero no se le podía apretar, aún así Bautista consiguió muletazos de mucha y muy buena calidad que llegaron al respetable. Tras dejar una media y dos descabellos fue silenciado tras una faena técnica ante el soso de El Pilar.
El segundo de la tarde fue un gran toro de El Pilar al que López Simón no entendió. Ya desde salida el animal marcó que sus virtudes si se conseguían entender podían traer consigo el triunfo. El quite de Grrido tuvo la premisa del temple. Saludó en banderillas Yelco Álvarez. Pedía caricia y suavidad el animal de El Pilar, que le abrieran los caminos y lo llevaran hasta el final. López Simon no acertó a tomarle el aire, a llevarlo toreado y potenciar las virtudes de un toro bravo. Porfió el madrileño en un trastero largo y anodino el no caló nunca en el tendido. Tras pinchazo y media estocada fue silenciado, siendo ovacionado Mirabajo en el arrastre, un toro que se fue con las orejas puestas al desolladero.
Otro gran toro fue este tercero de El Pilar, al que Garrido supo entender en una faena bella y de torero con fondo, pero de menos a más. Saludó con lances a la verónica de menton en el pecho y muñecas dormidas. Volvió a captar la atención del aficionado con un garboso quite por chicuelinas al sacar al toro del caballo. Saludó Antonio Chacón por dos pares de gran torería. Tuvo dos partes la faena del pacense al bravo de El Pilar. Una primera en la que lo llevó embarcado en la franela por ambos pitones, labor en la que acertó en tiempos, terrenos y alturas. Los remates por bajo y sobretodo los pases de pecho a la hombrera contraria tuvieron largura y despaciosidad. Una segunda parte en la que no le apretó de verdad, dejando muletazos con un punto de belleza pero sin arrebatarse del todo. Su final de faena volvió a conectar con el tendido debido a unos remates muy toreros. Tras una estocada arriba el toro tardó en caer. Tras sonar un aviso se le pidió la oreja. Vuelta al ruedo fue su balance. Sospechos se fue al desolladero tras escuchar una ovación.
Salió como sobrero en cuarto lugar un toro de casi 600 kilos que sacó nobleza pero no quiso romper de verdad. El segundo puyazo de Alberto Sandoval fue de esos que un aficionado valora. Lo lidió de forma pulcra un César Fernández muy en torero. Llegó noblón pero apagadote el toro al tercio de muleta. Porfió el torero francés ante un toro al que no se le podía apretar. Dejó pasajes sueltos el torero de Arles de muletazos templados pero siempre a media altura. No tuvo opciones Bautista con este sobrero de El Pilar.
Y volvieron a devolver un toro de El Pilar. En su lugar salió un Niñito que pese a salir suelto y no definirse en los primeros tercios. Lo picó de forma muy torera Ángel Rivas. Lo vimos más centrado al madrileño en las primeras series, intentando al menos llevar la embestida del interesante toro salmantino, pero fue un espejismo, a partir de ahí Alberto no acertó a darle al toro lo que pedía, realizando una faena plana, vulgar, sin eco en el tendido. Se amontonó ante un toro que pedía mando, no acertando en distancias y alturas, en una faena que dio la sensación de no estar estructurada. Tras pasaportar al toro fue silenciado ante un lote de Puerta del Principe.
No tuvo esa embestida enclasada y templada este sexto, un toro que como a alguno de sus hermanos le costó definirse de salida. Lo lidió de forma suave y templada un Chacón que va camino de ponerse en figura. Estuvo muy dispuesto el extremeño ante un toro que transmitió pero al que le faltó clase. Se mostró decidido y con ganas de no desaprovechar las embestidas que llevara dentro el toro. Tuvo exigencia el animal, había que llegarle mucho, esperle y tirar de él. La serie final al zurdas fue la más redonda de su actuación en el sexto dentro de una faena algo desigual pero en la que nunca se dejó ganar la pelea. Tras dejar una estocada algo caída el público pidió de forma unánime la oreja, la cual fue finalmente concedida.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Décima de abono. Corrida de toros. Media plaza.
Seis toros de El Pilar.
Juan Bautista, silencio y silencio.
López Simón, silencio y silencio.
José Garrido, vuelta tras aviso y oreja.