EMILIO TRIGO
La primera corrida de toros de la Feria del Pilar tenía
lugar en la tarde de este domingo en la plaza de toros de La Misericordia. Un
serio encierro de La Quinta esperaba en chiqueros a tres toreros con galones
para este tipo de corridas: Rafael Rubio «Rafaelillo”, Ricardo Torres y
Alberto Álvarez.
1º Serio toro el que abrió el festejo, con casi seis años
cumplidos, pues nació en octubre de 2010. ‘Buenasnoches’ asomaba los
importantes leños, más descarado del izquierdo. El maestro Rafaelilo lo recibió
sobre los pies con un manejo del percal a la antigua usanza. Sabor añejo en el
saludo capotero. Tuvo el primero un viaje corto y molesto cabeceo durante la
lidia y de esa guisa llegó al último tercio. Antes en la segunda vara recibió
el castigo de las dos. En la primera de dolió y escupió el peto. Él abreplaza resultó
muy complicado y difícil de principio a fin. Astado que jamás pasaba de la
taleguilla y que desarrolló mucho sentido. Cierto que nunca alargó el
cuello buscando presa pero también lo es
que no tuvo uno. El de la Quinta, reservón y probón tuvo en frente a un
Rafaelilo que impuso su criterio con raza y personalidad. Gran disposición y
vergüenza torera del murciano ante el imposible rompió plaza. Estocada y varios
descabellos. Pitos al toro y ovación al
diestro.
2º. Bonitas verónicas de Torres al escurrido segundo. Un
toro que metió muy bien la cara en el percal del aragonés. Tras una decorosa
lidia y notable tercio de banderillas, destacaron los pares de Marco Leal que
saludó montera en mano. Pero lo más bello de la lidia al primero de Torres fue
el precioso quite de Alberto Álvarez por ‘Caleserinas engarzadas con Criolinas’
otros le llaman ‘Gallosinas’. Ricardo brindó al respetable en los medios y tras
la tanda inicial Torres se lo quito de encima. El de la Quinta hizo un par de
estratos y el diestro local cogió por la calle del medio gesticulando que
«no tiene ni uno» bajonazo y bronca.
3º. Dos largas cambiadas y ramillete de verónicas muy
dormidas. Álvarez se expresó con sello en el saludo al tercero. Un toro bien
hecho, recogio y de preciosa estampa que resultó manejable en conjunto y que
sacó nobleza humillación y gran fijeza en la muleta aunque justa raza. Alberto
comenzó con el pase de las flores y una trabada tanda a diestras.
Posteriormente fue cogiendo el aire a la entregada embestida y lo llevó
embebido con el trazo en línea. Este hecho lo agradeció el toro e imprimió
largura a cada muletazo. Torero de envergadura con la planta erguida que
realizó una faena de interés con buenas formas clásicas. Hubo ligazón por el
pitón derecho y lo mencionado al natural, largura y profundidad. Pinchazo,
estocada y dos descabellos esfumaron la posible oreja. Se llevó un tremendo
susto al perderle la cara al toro con el descabello. Palmas al toro y ovación al torero.
4º. Se explayó Rafaelillo con el capote al recibir al
cuarto. Verónicas con la solera del tiempo para disfrute de los presentes,
incluso intercaló alguna chicuelinas con los mismos aires. A este no se le
castigó en varas. Brindis público. De rodillas comenzó Rafael poniendo en liza una muleta cautivadora
donde fluyó un toreo asolerado. Dio distancias y tiempo sin querer atosigar ni
obligar. Rafael compuso una personal faena casi toda por el potable pitón
derecho a pesar de llevar la cara a media altura el cuarto de la tarde. Por el
izquierdo le tragó las dudas del animal y le sopló de uno en uno varios
naturales muy mandones. Él murciano se expresó con el sabor de la madurez en
una faena para aficionados exigentes. Muy Importante con un toro manejable que
miró y se enteraron muy pocos del tendido. Un mete y saca le quitó el futurible
apéndice. Silencio que no tiene justificación alguna.
5º. El quinto fue otro bello ejemplar, un cárdeno girón con
las puntas hacia arriba. Torres amarró un cortito pero bien ejecutado saludo.
El segundo del lote de Ricardo tuvo mucha toreabilidad. Torres lo muleteó
principalmente por el pitón izquierdo con tandas largas pero carentes de
transmisión. Por el derecho, la misma tónica. Faena plana del diestro local sin
mayores. Lo mejor la estocada arriba. Ovación al toro y silencio para Ricardo
Torres.
6º. El inicio capotero de Álvarez fue un calco del tercero
con largas cambias en el tercio y bien a la verónica. Astado bravo en el
caballo al que acudió de largo y pronto. Brindó a Simón Casas y Nacho Lloret.
Alberto comenzó por abajo genuflexo, con mando, empujando al toro para
‘alante’. Un astado que cambió en el último tercio y que fue muy distinto en
comportamiento a los primeros tercios. En este, salía distraído de cada
muletazo con la cara arriba y queriendo irse a tablas. Álvarez buscó retenerlo
tapándole la cara y de paso ligar a
derechas. Alberto volvió s mostrar buenas formas en su toreo pero faltó mayor conjunción y transmisión. Estuvo muy por
encima del cierraplaza que después de lo visto fue un mentiroso en el peto.
Pinchazo, arreón a los de plata y dos estocadas. Ovación tras aviso.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de La Misericordia. Segunda de la Feria del
Pilar. Corrida de toros. Media plaza.
Seis toros de La
Quinta.
Rafael Rubio «Rafaelillo”, ovación y silencio.
Ricardo Torres, bronca y silencio.
Alberto Álvarez, ovación y ovación tras aviso.
FOTOGALERÍA: @TOROSZARAGOZA