ADIEL ARMANDO BOLIO
En el segundo día del Año Nuevo, como ya
estaba pactado en el coso charro taurino «Xonacatique” de la pintoresca ciudad
de Jesús María, Aguascalientes, la empresa «Unidad Torera”, representada por
los diestros doctorados Víctor Mora y César Delgadillo, se dio la segunda
novillada en la que resultó claramente triunfador el joven espada Rafael
Reynoso al cortar dos orejas y por ello ser izado en hombros pero más allá del
resultado es que en este chaval hay un torero rescatable y ojalá pueda ser
tomado en cuenta para la próxima Temporada Novilleril 2016 en el coso «San Marcos”
de la capital del estado.
Otros que igualmente no deberían pasar
desapercibidos por la misma empresa de Espectáculos Taurinos de México son los
espadas Jorge Didier, Luis Miguel Cuéllar y Abraham Veloz, quienes han tenido
una destacada actuación en el mismo festejo menor jesusmariense, habiendo por
cierto «tocado pelo” Veloz y el regiomontano Óscar de León, a quien de plano el
festivo juez de plaza Rafael Iñiguez «El Ribereño” le regaló un trofeo
auricular por no hacer nada.
Así pues, ante una media entrada en tarde de
agradable clima, aunque con algo de lluvia durante la lidia del quinto astado,
se lidiaron siete astados variopintos de mejor presencia con relación al sábado
anterior de la dehesa guanajuatense de San José de Buenavista, siendo buenos el
tercero y el sexto; de regulares a malos el primero y el segundo, en tanto que
los demás presentaron dificultades.
Abrió plaza Jorge Didier, quien se dejó ver
empeñoso con el capote, sobre todo en un quite por tafalleras. Al astado, que
fue soso y corto de embestida, el torero le plantó cara con determinación para
realizarle una faena de aguante y valor sereno por ambos lados, con ideas
claras. La parte final del trasteo fue la mejor pero todo lo malogró con la
espada para ser aplaudido.
Siguió Luis Miguel Cuéllar para estar
voluntarioso tanto con el capote como con la muleta en una faena que tuvo
buenos pasajes y detalles toreros a pesar de lo mirón y nada fácil que era el
astado. Aliñó con atingencia y todavía le alcanzó a sacar una tanda derechista
a media altura. No acertó con el acero y al final se le aplaudió el esfuerzo.
En su turno Rafael Reynoso, con el burel
llamado «Foliar”, demostró que es un torero al que hay que darle más festejos
pues demostró que puede andar con pie firme en esta difícil profesión siempre y
cuando se dedique de lleno a ella y no andar de secretario y joven de compañía
o a la sombra de quien no le redituará nada bueno, pero bueno, ese es otro
boleto. Aquí lo importante es que Rafael con el capote se mostró de manera
estética en lances a pies juntos. Brindó su faena a don Luis Cuéllar, la que
fue llena de talento y muy centrada, con calidad, temple y mucha dimensión,
además de su buen trazo por ambos lados. Ligó ayudados por alto para cerrar su
quehacer taurino y matar de certera estocada y algo trasera, lo que le valió
merecidamente el corte de dos apéndices.
El neoleonés Óscar de León, con «Florentino”,
un ejemplar muy complicado, sólo se le vio buena disposición, no más. Si acaso,
por ahí le extrajo alguno que otro natural para terminar de estocada entera y
de manera inexplicable el juez de plaza «El Ribereño” le otorgó una oreja que
no tenía por qué ser.
En el lugar de honor actuó el chihuahuense
Ricardo Rocha bajo una leve lluvia para no hacer nada con el capote y con
muchas dudas andar con la muleta. No tuvo suerte también al matar y el novillo
dobló solo. Silencio.
En sexto sitio apareció el burel de nombre
«Bolio”, mismo que le tocó en suerte a Abraham Veloz y a quien nos dio mucho
gusto verle sus avances pues lo hemos visto en su desarrollo taurino y lo que
le apreciamos este sábado fue un mejor asentamiento. Con el capote se dejó ver
empeñoso pero con la muleta, principalmente por naturales, largó tela de la
buena y con mucha clase y largueza. Terminó con manoletinas y tras un pinchazo
y una estocada contraria se le concedió una valiosa oreja.
Y con el torete que cerró plaza, que por
cierto hizo cosas de meneado, el debutante con caballos de Riobamba, Ecuador,
Javier Segovia, tras un quite valiente por chicuelinas del primer espada Jorge
Didier, anduvo totalmente a la deriva, sin saber qué hacer, no tuvo capacidad lidiadora
para resolver y ello lo llevó a estar varias veces a merced del astado. Mató
como pudo y escuchó algunas palmas de aliento.
FICHA DEL FESTEJO
JESÚS
MARÍA, Aguascalientes. Segunda y última novillada de las Fiestas de Fin de Año
y Año Nuevo. Coso charro taurino «Xonacatique”. Entrada. Media en tarde de
agradable clima, con algo de lluvia durante el quinto astado.
Siete novillos de San José de Buenavista, de
mejor presentación, siendo buenos los corridos en tercero y quinto lugares. De
regulares a malos resultaron el primero y el segundo en tanto que los demás
presentaron complicaciones.
Jorge
Didier: Palmas.
Luis
Miguel Cuéllar: Palmas.
Rafael
Reynoso: Dos orejas con salida en hombros.
Óscar
de León: Una oreja benévola.
Ricardo
Rocha: Silencio.
Abraham
Veloz: Una oreja.
Javier
Segovia, quien debutó con caballos: Palmas.
Foto: Francisco Vargas