La gran afición por el toreo ecuestre en Nava de la Asunción volvió a quedar plasmada en la buena entrada que se registró en el coso segoviano, motivada sobre todo por la presencia, por primera vez en esta plaza, de Diego Ventura.
Y el jinete luso-andaluz no defraudó y le bastó su primer toro, el segundo de lidia ordinaria, para dejar claro por qué es el número uno de la actualidad, pues con un dominio superior y una cuadra brillante, supo encelar y alegrar las buenas embestidas de un toro que ya nunca tuvo más voluntad que la que Ventura le ordenó con sus caballos. Diego pisó los terrenos del toro, provocó las arrancadas, clavó arriba, al estribo, y adornó las salidas con piruetas y templados galopes de costado. El cenit de su actuación fueron los dos pares a dos manos que dejó en lo alto del morillo, seguidos de un soberbio rejonazo que puso en sus manos el doble trofeo. Con el quinto, a pesar de hacerlo todo bien, no consiguió redondear la tarde, pues el manso se defendió con la cara arriba e imposibilitó suñ lucimiento.
La tarde la abrió Sergio Galán, que contó con un lote parejo en su comportamiento bonachón, aunque falto de codicia y entrega, al que había que ponerle mucho para poder transmitir. El conquense siempre toreó a favor del toro, jugando distancias, querencias y terrenos con sobriedad y buen gusto, dejando momentos de mucha verdad, dando siempre los pechos de sus monturas. A ambos los mató de un certero rejón y paseó un trofeo de cada uno.
Por su parte, el portugués David Gomes supo aprovechar las bondades del tercero, al que sujetó tras la grupa con la voz, después de haberle llegado con decisión a la cara del toro. Lo mejor fueron las banderillas al quiebro, con las que conectó rápidamente con el público, que supo premiar su labor tras el buen uso del acero, con las dos orejas. Menos suerte tuvo con el sexto, un toro manso y rajado, con el que su faena nunca terminó de tomar vuelo.
FICHA DEL FESTEJO
Martes 20 de septiembre. Nava de la Asunción (Segovia). Tarde calurosa. Dos tercios de entrada.
6 toros despuntados para rejones de Herederos de José Luis Osborne, correctos en su presencia y de buen juego, especialmente los tres primeros, nobles, fijos y de buen tranco. Los otros tres más mansos y aquerenciados.
Sergio Galán: Oreja y oreja.
Diego Ventura: Dos orejas y ovación.
David Gomes: Dos orejas y ovación.
Incidencias: Los tres rejoneadores salieron a hombros.