OLIVENZA (BADAJOZ)

Roca Rey, que corta una oreja, y Juan Ortega hacen lo más granado en el cierre de Olivenza


domingo 3 marzo, 2024

Roca Rey le cortó al tercero el único apéndice de una corrida que no terminó de romper, en la que Morante pasó sin pena ni gloria y Juan Ortega dejó destellos torerísimos.

Roca Rey
Roca Rey en la vuelta al ruedo. Foto: Plano

Morante de la Puebla, Juan Ortega y Roca Rey protagonizaban, este domingo, el cierre de la Feria de Olivenza con un cartel en el que se lidiaban toros de Hermanos García Jiménez.

Morante, sólo detalles ante la falta de raza del primero

En primer lugar salió Discreído, cuatreño de 505 kg y negro de capa. Lo recibió Morante de la Puebla sobre las tablas y solamente necesitó dos verónicas para que rugiera el coso oliventino. Un único puyazo de castigo fue suficiente en el tercio de varas. Por bajo lo midió Morante a un astado que embestía con trote cochinero y con cierta incertidumbre. Solo le pudo dejar el cigarrero algún derechazo suelto de calidad, porque el viento también hizo eco de presencia. A zurdas lo intentó de uno en uno, pero el astado, falto de motor y raza, no le permitió pegarle uno en condiciones. Media estocada de efecto fulminante. Saludos.

La gracia templada de Juan Ortega, oreja de un segundo bis de La Ventana muy a menos

Sin Título

Tras romperse el pitón el segundo al derrotar con el burladero, salió el primer sobrero, un cuatreño de La Ventana del Puerto de nombre Ilustrado, con 537 kg y castaño de capa. Juan Ortega sacó sus muñecas a relucir en un recibo capotero veroniqueando con garbo. Quitó en los medios por ajustados delantales, que cerró con una media. Brindó en los medios el sevillano al público. Acariciando al toro para no castigarle tanteo de inicio su faena. Con la diestra lo intentaba, pero el astado se limitaba a pasar, sin humillar al vuelo de la tela. Por el izquierdo también evidenció esa falta de emoción y raza, pese a los intentos del trianero. Faena de quiero y no puedo de principio a fin. Remató con una serie de molinetes de caricia. Estocada hasta las cuerdas que le valió para cortar un apéndice.

Un explosivo Roca Rey le corta la oreja al emotivo «Indeciso» tercero

Sin Título

En tercer lugar salió Indeciso, toro cinqueño de 511 kg y negro listón. Vibrante y variado saludo de Roca Rey, dejándole un ramillete de bellas verónicas y hasta cuatro ajustadas chicuelinas, cerrando con una revolera. Tras el puyazo de castigo, subió la temperatura quitando en los medios por chicuelinas y tafalleras. Arrollador fue el inicio de faena, de rodillas con cambiados por la espalda y ajustados derechazos. Citando largo y con profundidad fueron las series por el derecho, aprovechando la clase y el motor del astado salmantino. Al natural no embestía el toro con la misma codicia, tirando el peruano del toro para darle esa profundidad al muletazo. De arrojo fue el arrimón final, cargado de valor y quietud, que puso al público en pie. Gran estocada que necesitó el uso del verduguillo para caer. Oreja.

División para Morante tras lidiar al cuarto

Avispado salió en cuarto lugar. Con 535 kg y castaño de capa. Muy suelto de salida el astado, al que Morante solo le dio dos. Un único puyazo (y suficiente) en el tercio de varas. Pegado sobre las tablas y con ayudados a dos manos trasteó el cigarrero el inicio de faena. Tuvo que tirar de oficio ante un indeciso astado que embestía sin clase en cada cite por el derecho. Cambio de pitón, pero el toro evidenciaba una acuciante falta de raza, por lo que tras intentarlo sin éxito, decidió abreviar Morante. Media estocada, que tardó en caer. División.

Ovacionada la torería de Ortega en el quinto

En quinto lugar salió Esaborío, toro cinqueño de 528 kg y negro de capa. Con elegancia le dejó Juan Ortega cuatro verónicas sueltas que calaron en el tendido, por su torería y bello trazo. Trasero cayó el puyazo de José Palomares. Exquisito quite por tafalleras del trianero, que culminó con una media en la que se paró el tiempo. Tanteó de inicio Juan por bajo, ante un toro que repetía, pero embestía muy atropellado. Lo consiguió meter en la muleta, tirando despacio y con las telas siempre en el hocico. Esa ligazón hizo posible que el sevillano trenzara un par de series corridas de mucho gusto. Al natural le sopló alguno suelto muy despacio, de belleza innata. Poco más pudo hacer el diestro ante el burel, ya venido a menos. Estocada tras pinchazo. Ovación.

Roca Rey, palmas tras lidiar al sexto

Herrero cerraba la tarde (y la feria). Toro cinqueño de 557 kg y castaño de capa. Se gustó Roca Rey a la verónica, rematando con torería (aunque le enganchó el capote). Dificultades en el tercio de vara, que tuve que salir al quite Morante para apagar el fuego. Brindó en los medios al público. Pasaba sin emoción el toro por el derecho, sin transmisión ni humillación. Tiró de arrojo el peruano por ese pitón, tirando del toro y dando profundidad a sus pases. Mejoró el astado y se dejó de pegar un par de series que calaron en el tendido. Media estocada. Palmas,

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Olivenza (Badajoz). Última de abono. Corrida de toros. Casi lleno.

Toros de Hermanos García Jiménez y uno, el segundo bis, de La Ventana del Puerto, tras partirse un pitón el titular.

Morante de la Puebla, ovación y división.

Juan Ortega, oreja y ovación.

Roca Rey, oreja y palmas.

FOTOGALERÍA: ALFONSO PLANO

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