Miguel Moura, Lea Vicens y Guillermo Hermoso de Mendoza hacían el paseíllo, en la tarde de este 29 de julio, en la plaza de toros de Bayona con una corrida de Romao Tenorio. Y Guillermo, que por sus triunfos es el nombre clave de la temporada de toreo a caballo, selló otra tarde para el recuerdo en la que paseó tres orejas.
Destacó sobremanera su actuación frente al primero de su lote, un tercero en el que hicieron pega los forcados de Moita do Ribatejo al que dejó instantes de toreo de frente de mucho calado y calidad. Y quiebros de espanto a ese animal, al que dejó un rejonazo fulminante y paseó el doble premio. El acero evitó otro premio grande frente al sexto, un toro con el que destacó a lomos de Ilusión y en el que dejó una obra de torero importante. Sobre todo, esa forma de citar con pureza máxima y de frente llegó al tendido. De no haber fallado con el rejonazo final en este sexto, hubiese cortado el rabo.
También expuso en su tarde Lea Vicens, que no tuvo suerte con un primero mansurrón que quería olivo todo el rato y con un quinto parado. Fue todo exposición sin premio y sin suerte con el acero. No obstante, sí tocó pelo con el toro de regalo, un animal de San Pelayo en el que siguió ofreciendo a los suyos todo su repertorio, dejando momentos de mucho valor.
Miguel Moura, que se enfrentó a un flojo lote sin apenas opciones, paseó una oreja a una obra de entrega al cuarto, en el que pinchó y pudo haber cortado otra.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Bayona, Francia. Corrida de rejones. Lleno, unos 7.000 espectadores.
Toros de Romão Tenorio, el sexto de vuelta al ruedo. Y un sobrero de San Pelayo como séptimo.
Miguel Moura, silencio y oreja.
Lea Vicens, silencio, palmas y oreja en el sobrero que regaló.
Guillermo Hermoso de Mendoza, dos orejas y oreja.