AGUASCALIENTES

Saldívar se impone cortando tres orejas, El Payo lo borda con el capote


domingo 24 abril, 2016

Una vuelta al ruedo cosechó el rejoneador Emiliano Gamero y sólo palmas pudo escuchar Alejandro Talavante

Una vuelta al ruedo cosechó el rejoneador Emiliano Gamero y sólo palmas pudo escuchar Alejandro Talavante

ADIEL ARMANDO BOLIO / FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ

¡Por fin! Llegaron las orejas, los triunfos fuertes y la primera Puerta Grande a la CLXXXVIII edición de la Feria Nacional de San Marcos 2016, en el coso Monumental de la ciudad de Aguascalientes, ante tres cuartos de entrada, estupendo ambiente y bajo un clima agradable, aunque con algo de viento en la que fue tercera corrida del serial mayor.

Fue el local Arturo Saldívar, quien a base de darse un arrimón y toreo que gusta a la galería, logró obtener tres orejas para ganarse la salida en hombros por la Puerta Grande de San Marcos. Su alternante, el queretano Octavio García «El Payo” demostró el por qué está pasando por el mejor momento de su carrera, al hacer lo más torero de la tarde, lo que le valió cortar un valioso apéndice. Y el badajocense Alejandro Talavante, a pesar de su voluntad, se fue de vacío, además de que el rejoneador mexiqueño Emiliano Gamero ha tenido una más que decorosa reaparición, con todo y toro de regalo, en la plaza donde en la Feria de 2015 se hiciera de un rabo.

Se lidiaron entonces seis ejemplares de la dehesa de Montecristo cuyo común denominador fue la desesperante sosería, si acaso el segundo fue el que más se dejó torear. Bueno fue el de rejones, de la divisa de Bernaldo de Quirós y regular el de regalo, también para el toreo a caballo, del hierro de El Junco.

Abrió el festejo el rejoneador EMILIANO GAMERO, quien tuvo una destacada actuación hasta que sacó a su caballo «Sabor a Mí” que simplemente no quiso nada a pesar de la tardada insistencia de su jinete. Quiso recuperar el nivel encima de «Leyenda” y «Cigala” pero ya no se pudo. Tuvo problemas para matar fue silenciado.

Regaló un toro, que salió como octavo, de El Junco, que en términos generales se dejó torear y que aprovechó de manera intermitente Emiliano, sobre todo cuando a media luz montó «Casanova”, a «Encanto”, con el que realizó un comprometido giro en la cara del toro, además de lo que hizo sobre «Leyenda”, «Cigala”, destacando sus adornos al ejecutar balotadas. Mató de manera defectuosa y terminó dando la vuelta al ruedo.

A pie, el extremeño ALEJANDRO TALAVANTE ha tenido una empeñosa actuación con el lote menos potable, soso y con poca fuerza, además de que por momentos lo molestó el viento. Tanto en uno como en otro astado dio algunos muletazos de mérito pero nada más había que hacer. En su primero fue aplaudido y en su segundo tuvo silencio.

En su primero, llamado «Mexicano”, el queretano OCTAVIO GARCÍA «EL PAYO” lo lanceó bien a pies juntos y veroniqueó con valor pues tuvo inclusive que sortear el viento. En el tercio de varas sufrió un tumbo el picador Salomón Azpeitia. Su faena de muleta, Octavio la cuajó a base de firmeza, mando, poder y evidente actitud, haciendo un toreo serio y de mucho empaque por ambos pitones. Supo someter y desengañar para estructurar su labor cadenciosa, rítmica y a veces a media altura, además de tener los recursos toreros y estéticos a tiempo en momentos de apremio. Acabó de estocada honda, algo delantera y desprendida para que le fuera concedida y valiosa oreja.

A su segundo lo veroniqueó de manera sensacional, jugando los brazos con plasticidad para rematar con soberbia media de cartel. Con la sarga, a un astado de extrema sosería y de poca fuerza, le puso disposición en todo momento con las dos manos pero sin respuesta de su antagonista. No acertó al matar y se le aplaudió el esfuerzo.

El anfitrión ARTURO SALDÍVAR al primero que le tocó en suerte, de nombre «Buen Amigo”, lo recibió cerrado en tablas con dos temerarias largas cambiadas de rodillas, además de una verónica y una rodolfina también de hinojos y ya de pie instrumentar valientes chicuelinas. A otro astado soso y con problemas, Arturo lo empezó a lidiar con la franela vaciando por alto y luego dar cambiados por la espalda. Vino entonces el toreo de mucha exposición, de pisar terrenos prohibidos y que apestaban a «cloroformo”. Vaya manera de jugarse la vida, dejándose rasgar la taleguilla con la punta de los pitones. Y así, a base de esa intimidación torera, Saldívar espantó de valiente. Se tiró a matar y dejó una certera estocada para cercenar una oreja.

Y salió su segundo, «Peñista”, al que lanceó bien a la verónica y con la muleta se dedicó a cuajar una faena, basada en toreo efectista y para la galería. Cambiados por la espalda, pases de trinchera, algunos derechazos con temple para luego convertirse su quehacer en algo entusiasta, volvió a acortar distancias y así fue como fundamento su trasteo, poniéndolo todo el torero ante la inoperancia del «socio”. Manoletinas para abrochar la faena y finiquitar de estocada desprendida y trasera para que a petición popular se le concedieran las orejas entre gritos de ¡torero!

FICHA DEL FESTEJO

Aguascalientes. Tercera corrida de la Feria Nacional de San Marcos. Coso Monumental. Entrada: Tres cuartos en tarde de buen clima y algo de viento.

Seis toros de Montecristo, de buena presentación pero sosos y descastados. Sólo el segundo fue el que más se dejó torear. Dos toros para rejones, uno de regalo, siendo bueno el de Bernaldo de Quirós y regular el de El Junco, que fue el de obsequio.

El rejoneador Emiliano Gamero: Silencio y vuelta al ruedo en el de regalo.

Alejandro Talavante: Palmas y silencio.

Octavio García «El Payo”: Una oreja y palmas.

Arturo Saldívar: Una oreja y dos orejas, con salida en hombros por la Puerta Grande de San Marcos.