AZPEITIA (GUIPÚZCOA)

Sergio Serrano sale a hombros por el hule de un rotundo Pérez Mota y un grave Paulita


viernes 31 julio, 2015

Se lidiaron toros de Celestino Cuadri para Antonio Gaspar “Paulita”, herido en el cuello, Sergio Serrano y Manuel Jesús Pérez Mota, herido en el muslo derecho

Se lidiaron toros de Celestino Cuadri para Antonio Gaspar “Paulita”, herido en el cuello, Sergio Serrano y Manuel Jesús Pérez Mota, herido en el muslo derecho

Una
corrida de toros de Celestino Cuadri era el primer festejo mayor que acogía
Azpeitia para su Feria de San Ignacio 2015. En el cartel, el aragonés Antonio
Gaspar «Paulita”, el albaceteño Sergio Serrano y el gaditano Manuel Jesús Pérez
Mota.

Muy decidido salió Paulita con el primer Cuadri, que quiso irse detrás de la muleta de Antonio hasta que le duró el fuelle. Se entregó el animal a la pelea y humilló los embroques para dejar un buen retrato en ese momento, apenas en tres tandas, que fue lo que duró el animal. Llegó entonces una faena más para el tendido, con molinetes y desplantes para adornar esa segunda parte de un trasteo más que digno emborronado por un pinchazo y por una cornada en el cuello que le dejó el animal a la vez que lo tumbaba de un estoconazo fulminante. La gente se quedó fría con el suceso y no pidió el trofeo para el torero herido, pero sí le pegó una ovación que recogió Fernando Téllez.

Muchos kilos encima tenía el segundo, que se acostó mucho en el capote de Perez Mota y no terminó de deslizarse en los capotazos que le fue ganando el torero hasta los medios. Midió mucho el toro a Sergio Serrano en el quite que intentaba por chicuelinas. Muerta se la dejó desde el principio el gaditano, que aguantó con pie firme la reposición rebrincada devolviéndole suavidad a la protesta defensiva del Cuadri. Tuvo expresión y torería la labor de Manuel, templado siempre y estructurando con inteligencia. Terminó rompiendo el toro y entregándose hasta donde le permitió su condición, gracias a la perfecta labor del gaditano, planteando con oficio y trazando con una gran dimensión para cuajarlo por abajo. Le puso mucha torería a los ayudados por alto finales, remantando con uno de pecho monumental. Arriba dejó la espada atracándose de toro para cortarle una oreja.

Al largo tercero, bajo de cruz, tuvo que perderle pasos Sergio Serrano para encelarlo en el capote, aunque no hubo opción de estirarse a la verónica con brillantez. Sacó complicaciones el animal en varas y en banderillas, pero lo brindó al público el albaceteño. Áspero y pechugón fue el toro en la muleta, con la que buscó Serrano la franqueza con infructuoso resultado. Complicado estar delante, con su cara suelta, su salida arriba y su actitud defensiva para un Sergio voluntarioso y decidido, que porfió sin que obedeciese el animal, que nunca le dio opción. Le echó los vuelos con suavidad el albaceteño, que hizo un esfuerzo importante ante el desagradecido Cuadri para no recoger premio alguno. Pinchó, además, y escuchó silencio tras aviso.

A la
altura de la esclavina embestía el cuarto de la tarde, un toro que tampoco
humilló en el capote de Germán González, que a la postre salió pitado del
tercio. No bajó la cara en la lidia de Raúl Caricol tampoco. Comenzó faena
Pérez Mota en los mismos medios de la plaza ante un toro que, en el momento del
embroque, no embestía de verdad, por lo que Manuel Jesús no debía dejarle
pensar en los toques fuertes. Fue una faena de valor, de entrega y de verdad,
por derecho y de frente. Faena muy meritoria. Al entrar a matar, llegó el susto
para el gaditano, que salió feamente prendido después de una estocada en toda
la yema. Fue conducido rápidamente a la enfermería inconsciente.

 

Con
tranco andarín se comportaba el quinto de Cuadri, un toro que debió lidiar
Sergio Serrano por la cogida de sus dos compañeros. Era un toro largo, con
mucho kilo encima y que empujó en el capote de Francisco Plaza. Iba siempre muy
por encima de la esclavina. Fernando Casanova recibió un susto en el tercio de
banderillas del quinto, saliendo golpeado de la suerte. No se lo pensó ni un
momento y brindó al respetable su actuación, pero se le venía al pecho el toro
en cada muletazo. Se vino arriba la actitud del manchego para sacar las tandas
más enrazadas por el pitón derecho ante uno de Cuadri que se arrancaba pero se
frenaba en medio del embroque, algo que descolocaba totalmente la actitud del
torero. Mató a la suerte contraria en el primer encuentro pero pinchó con un
toro sin moverse, dejando a la segunda una estocada baja.

 

Demostró
desde el primer momento Sergio Serrano en la lidia del último toro de la tarde
quién era el que mandaba. Tuvo que ir a por él con el capote, empujando poco
después le toraco de 675 kilos al peto de Benito. En la faena de muleta, Sergio
Serrano se gustó en las dos primeras tandas muy decidido por el pitón derecho,
totalmente inteligente. A partir de ese momento fue sacando tandas en las que
primó la emoción por ese mismo lado hasta reventar al toro por abajo antes de
la estocada y pasear las dos orejas del de Fernando Cuadri.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza
de toros de Azpeitia. Primera de la Feria de San Ignacio. Corrida de toros.

Seis
toros de Celestino Cuadri. grandes y serios en general, desiguales de comportamiento.

Antonio Gaspar «Paulita”, ovación (herido).

Manuel Jesús Pérez Mota, oreja y ovación que recogió Raúl Caricol tras salir herido. 

Sergio Serrano, silencio tras aviso, ovación y dos orejas.