EMILIO MÉNDEZ
La segunda y última
corrida de la feria de Moroleón tuvo a un rotundo Adame y un triunfal Silveti
que salieron a hombros ante otro llenazo. Sobresalió la actuación de Joselito
Adame, quien después cortarle una oreja a su primer astado, a su segundo lo
terminó indultando para recibir los máximos trofeos simbólicos. Su acompañante
en la salida en volandas, Diego Silveti, le «tumbó” las orejas al primero de su
lote, en tanto que Octavio García «El Payo” se fue de vacío.
Ante otro lleno
absoluto en el coso «Alberto Balderas” se lidiaron tres toros de Barralva,
siendo bueno el tercero, regular el primero y resultar lastimado el quinto. Y
tres de De Santiago, con indulto al cuarto, número 8 y con 492 kilos, de nombre
«Palomo”; el segundo y el sexto fueron regulares.
En el toro que abrió plaza, llamado «Botas”,
de la dehesa de Barralva, Joselito Adame inició en la zona de tablas con una
larga cambiada de rodillas y ya de pie veroniqueó con soltura e instrumentó
chicuelinas, además de quitar vistosamente por navarras. Con la muleta comenzó
cerrado en tablas con un cambiado por la espalda para luego estructurar una
faena plena de oficio y experiencia por ambos lados. El astado fue a menos, se
refugió en tablas y el diestro terminó con estéticos ayudados por alto para
matar de estocada recibiendo y por ello ser premiado con una oreja.
A su segundo, marcado
con el número 8 y con 492 kilos, «Palomo” de De Santiago, un ejemplar de mucha
clase, calidad y claridad en la embestida, Joselito le ejecutó de manera muy
templada lances a la verónica y mejor se vio en un variado y vistoso quite. Su
quehacer de muleta fue verdaderamente sensacional por los dos pitones, con
pases de todas marcas, plenos de temple y largueza, sobre todo de mucha expresión
torera. La faena creció, al tiempo que en el tendido un cantante tenor le
cantaba un pasodoble en su honor y el público solicitó el indulto del noble
burel para que al final le fuera concedido en medio del contento general y con
gritos de ¡torero! a Adame, quien recibió simbólicamente los máximos trofeos.
Octavio García «El
Payo”, en el primer astado que le tocó en suerte, «Tomatero” de la divisa de De
Santiago, lanceó con plasticidad a la verónica. Su labor muleteril la inició de
rodillas en los medios para seguir en constante comunicación con el tendido a
través del contenido emotivo de su faena, en la que intercaló pases cambiados
por la espalda. Así continuó, con ganas y, sobre todo, evidente actitud, aunque
a veces pecó de eléctrico. Mató hasta el segundo viaje de media estocada para
escuchar palmas. En su segundo, «Corvino” de Barralva, «El Payo” nada hizo con
el capote. El toro que tenía bravura y calidad se mermó evidentemente al
resultar lastimado después de la suerte de varas. Con la franela hizo de verdad
el esfuerzo el espada, sacando muletazos de mucho mérito y personalidad pero al
no durar el astado lo que el torero deseaba decidió matarlo de estocada y ser
aplaudido.
En el primer ejemplar
de su lote, Diego Silveti, ante el llamado «No Te Rompas II” de Barralva, de
mucha calidad, trasmisión y sobrada clase, jugó bien los brazos en lances a la
verónica. Con la sarga ejecutó un trasteo muy personal, conectando con la
concurrencia. Ligó series por ambos pitones pero sin mantener un mismo nivel.
Terminó de efectivo espadazo para que le fueran otorgados dos apéndices
dividiendo las opiniones. Y en el burel que cerró el festejo, «Quijote” de De
Santiago, noble pero falto de trasmisión y recorrido, Diego estuvo empeñoso con
muchas ganas de hacer bien las cosas hasta lograr pasajes de importancia pero
sin llegar a redondear el trasteo. Terminó de estocada al segundo intento para
ser despedido con aplausos.
FICHA DEL FESTEJO
MOROLEÓN, Guanajuato. Segunda y última corrida
de la feria. Coso «Alberto Balderas”. Entrada: Lleno a reventar.
Tres toros de
Barralva, siendo bueno el tercero, regular el primero y resultar lastimado el
quinto. Y tres de De Santiago, con indulto al cuarto, número 8 y con 492 kilos,
de nombre «Palomo”; el segundo y el sexto fueron regulares.
Joselito Adame: Una oreja y dos orejas y rabo simbólicos.
Octavio García «El Payo”: Palmas y palmas.
Diego Silveti: Dos orejas con división de opiniones y palmas.
Al final, salieron en hombros Joselito Adame y
Diego Silveti.
FOTOGALERÍA Y VÍDEO: EMILIO MÉNDEZ