EL TORO DE LA MERIENDA

Hoy Sevilla no tuvo color especial


miércoles 6 abril, 2016

Una tarde pesada, anodina, una tarde en la que dos vueltas al ruedo no contaron el aburrimiento que vivió el tendido

Una tarde pesada, anodina, una tarde en la que dos vueltas al ruedo no contaron el aburrimiento que vivió el tendido

JAVIER
FERNÁNDEZ-CABALLERO

Una
tarde pesada, anodina, una tarde en la que dos vueltas al ruedo no contaron el
aburrimiento que vivió el tendido fue la cuarta de la Feria de Abril de
Sevilla. Dos vueltas al ruedo, la de El Cid al quinto y la de Joselito Adame al
sexto, que no resumieron la falta de raza de un encierro de Las Ramblas que,
junto a la falta de público que apenas llegó a media plaza –dato alarmante, y
más si se suma al elevado precio de las entradas en el coso del Baratillo- fueron
harakiri para las localidades del Arenal.

La
actuación de Miguel Abellán era la primera de su temporada española después de
que otros años sumara más festejos en marzo. Pero la Feria de Abril en esta
ocasión no fue pilar triunfal del madrileño, que vio cómo le tocaban en el lote
los dos toros más desapacibles del encierro.

Hacía Manuel Jesús «El
Cid” el primero de sus paseíllos en la Feria de Abril sevillana, afrontando el
próximo lunes su segunda tarde en el Baratillo. Y dejó por momentos gusto en su
faena al quinto de la tarde, el toro que devolvió una vana esperanza al
escenario andaluz porque por momentos e acopló por el lado derecho a su
oponente.

Joselito Adame llegó
de las Américas para intentar buscar aquí el oro perdido pero, tras la cornada
de Valencia de la que aún no estaba recuperado, no encontró más que dos toros
que no querían y, por su empecinamiento ante el cierraplaza, logró darse un
paseo en vuelta al ruedo.