Con la temporada dando sus primeras bocanadas de aire son muchos los toreros que ya tienen sitio asegurado en las primeras ferias del año. Tras pasar Valdemorillo ahora es el turno de Illescas, Olivenza, Castellón, Valencia, Arlés, Sevilla o Madrid, todas ellas con carteles en la calle -salvo el coso francés, que este jueves oficializa su abono-.
Dentro de estas hay un torero que no aparece en ninguna de ellas, José Tomás, diestro que pasó en blanco su temporada de 2023 y que, de momento, no se le conoce plaza para su vuelta a los ruedos tras más de un año. Alicante fue la última plaza donde se acarteló un torero que no necesita de acompañamiento alguno llenar una plaza de toros, como, por otra parte, ya se ha visto en sus últimas comparecencias.
La única certeza es que está preparándose en el campo, tanto a uno como al otro lado del charco. Ganaderías como El Pilar, Garcigrande, Victoriano del Río, Jandilla, Juan Pedro Domecq, La Palmosilla o Álvaro Núñez ha sido las vacadas donde el diestro de Galapagar ha lidiado toros y novillos, amén de tentar un buen ramillete de hembras para no perder el sitio delante de los animales.
Esto no quiere decir que su vuelta a los ruedos esté cercana; ya el año pasado toreó bastante en el campo y no se vistió de luce. Esto simplemente es un indicativo que nos hace ver que sigue preparándose, que continúa puliendo su toreo en distintas ganaderías de nuestro campo bravo.
Varios son los empresarios que en los últimos meses han llamado a la puerta de José Tomás, siendo atendidos por Salvador Boix, apoderado y hombre de confianza de Tomás. Simón Casas y José Luis Pereda el año pasado propiciaron un acercamiento que no cuajó, algo que sí consiguieron Alberto García y Nacho Lloret en 2022. José María Garzón puede ser otro de los empresarios que se acercara al entorno del madrileño -ya lo anunció en Granada y Algeciras- sin perder de vista a la Casa Matilla y a Simón Casas, unos de los gestores predilectos por el torero de Galapagar.