Este lunes, 8 de enero, es un día marcado en rojo en el calendario de la empresa Pagés: tradicionalmente, el día después de Reyes comienzan las negociaciones para el abono hispalense por parte de la empresa gestora de la Real Maestranza -en esta ocasión, dos días después al coincidir con festivo-.
Y entre los puestos de privilegio del abono se encuentra Morante de la Puebla, que volverá a ser eje de la temporada sevillana, con entre cinco y seis tardes en el abono. Desde hace años el torero de La Puebla del Río viene actuando en la Maestranza este número de paseíllos; sin ir más lejos en 2022 hizo el paseíllo 6 tardes en el abono y una más en el festival del 12 de octubre: Domingo de Resurrección, Viernes de Preferia, Viernes de Farolillos, Sábado de Farolillos, Viernes de San Miguel y Domingo de San Miguel. Un esquema que repitió la pasada temporada y que únicamente se vio modificado por su lesión de muñeca, que le obligó a causar baja en el cierre de San Miguel: Domingo de Resurrección, Lunes de Farolillos, Miércoles de Farolillos, Sábado de Farolillos, Viernes de San Miguel y Domingo de San Miguel.
Y al hablar de esos puestos de máxima relevancia es obvio citar un ramillete de cuatro toreros jóvenes hispalenses que así deben ser tratados por Pagés: Daniel Luque, por su excelsa temporada 2023 sólo manchada por la grave lesión de peroné sufrida en su cogida de El Puerto de Santa María.
En segundo lugar, un hecho histórico como el de Borja Jiménez, que cortó tres orejas en Madrid a la corrida de Victorino en octubre (un torero sevillano no salía con tres orejas a hombros de Las Ventas desde Paco Camino en 1976). Del mismo modo, destacaron sus tardes en Pamplona -donde toreó la corrida de José Escolar-, Zaragoza -donde lidió la de Palha el pasado 12 de octubre- o el festival de Sevilla con el que cerró temporada el día 15 de ese mes, paseando una oreja de un astado de Domingo Hernández. Un coso, además, en el que salió por la Puerta del Príncipe de novillero.
En tercer lugar, un Pablo Aguado que dejó una de las obras más excelsas en La Maestranza la pasada temporada y Juan Ortega, máxime tras el rompedor inicio de temporada que prepara.
Por otro lado, Roca Rey, como base de todas las Ferias, es junto a Morante el gran pilar de la cumbre del escalafón. Y a partir de ahí nombres como Castella -salió por la Puerta del Príncipe en San Miguel-, Manzanares o Emilio de Justo -que cortó dos orejas a un toro de García Jiménez en este ruedo la pasada temporada-.
Y completando el capítulo de jóvenes, Tomás Rufo, Fernando Adrián y Ginés Marín, el primero por ser un nombre clave en esta plaza y en las principales ferias – no olvidemos su última Puerta del Príncipe-, el segundo por ser una de las grandes revelaciones de los últimos años y conseguir dos puertas grandes en Madrid la pasada temporada; el tercero, por cortar dos orejas en el ruedo hispalense en la pasada Feria de Abril.
A partir de ahí, no deben faltar toreros de la talla de El Cid, Escribano, un Lorenzo con una oreja la pasada temporada…
Los sueños comienzan a cuajarse en la calle Adriano, donde no deben faltar nombres fundamentales para el aficionado hispalense.
