LA CRÓNICA DE PLATA

El Torero… de plata


sábado 27 mayo, 2017

El torero de plata dio la cara hoy en Madrid. El gran nivel que se está mostrando en las filas de las cuadrillas a lo largo de toda la feria de San Isidro volvió a relucir.

El torero de plata dio la cara hoy en Madrid. El gran nivel que se está mostrando en las filas de las cuadrillas a lo largo de toda la feria de San Isidro volvió a relucir.

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO

El torero de plata dio la cara hoy en Madrid. El gran nivel
que se está mostrando en las filas de las cuadrillas a lo largo de toda la
feria de San Isidro volvió a relucir en un festejo en el que los toros de El
Torero no se lo pusieron fácil a la terna. Una corrida destartalada, descompuesta,
fea de hechuras que terminó por no embestir y en la que varios nombres
plateados sacaron luz entre las sombras del encierro y la gallardía de Adame.

«Jilguero” se llamaba el primero de la tarde, un negro
listón nacido en diciembre de 2011, con cinco años, con un peso de 545 kilos.
Echando las manos por delante fue la embestida del animal en el capote del
madrileño antes de entrar al peto de El Legionario, costándole también por su
condición suelta. En el capote de José Daniel Ruano mostró esa misma condición
suelta, para que entrase en primer lugar Agustín Serrano y clavando el tercero
David Saugar «Pirri” en toda la cara.

«Verbenero”, un negro bragado meano, cuatreño, era el
segundo de la tarde, más bajo que el anterior y con 537 kilos, primero del lote
de Joselito Adame. Al relance entró al caballo que montaba Óscar Bernal y por
gaoneras fue el quite de Marín. Un importantísimo par, otro de los grandes que
lleva esta feria, dejó Fernando Sánchez en primer lugar. «Oropéndolo” se
llamaba el cuarto, cinqueño, número 42, el de más peso de la corrida, con 580
kilos, segundo del lote de Joselito Adame. Se dejó pegar sin más en el caballo
que montaba Manuel José Bernal,. Con vistosidad colocó el primer par de
banderillas Miguel Martín ante la lidia de Tomás López y la gran efectividad
con conexión de Fernando Sánchez en su rehilete. «Omani” llevaba por
nombre el sexto de la tarde, el más armónico de la tarde. Óscar Bernal se
encargó del tercio de varas del animal, al que lidió Miguel Martín.

«Pargo” llevaba por nombre el primero del lote de Ginés
Marín. Su padre Guillermo Marín picó a un toro que se cayó en varias ocasiones
y fue protestado fuertemente por el tendido. Antonio Manuel Punta fue el
encargado de lidiar al animal, para nada sobrado de fuerzas, entrando Jesús
Díez «Fini” en primer lugar a parear. No cambió el presidente el toro a
pesar de su evidente falta de fuerzas. «Hurtador” llevaba por nombre el
quinto, un cinqueño con 531 kilos y segundo del lote de Marín. Con una
cornamenta que asustaba, acusaba una falta de visión de salida, acercándolo
Fini al caballo de Agustín Navarro. A pesar de la mala condición mostrada por
el toro también en el tercio de banderillas, brindó Marín al público.