LA CRÓNICA DE PLATA

¡Que viva el tercio de varas!


viernes 26 mayo, 2017

Ovacionó la primera plaza del mundo a los subalternos y también a los hombres de a caballo: cuando hay emoción en el toro, la plata reluce por sí sola

Ovacionó la primera plaza del mundo a los subalternos y también a los hombres de a caballo: cuando hay emoción en el toro, la plata reluce por sí sola

 JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA:
PALOMA AGUILAR

Y Madrid recuperó los grandes tercios de varas con emoción,
que dan juego al tendido y con una corrida encastada y brava como la de
Jandilla que salió hoy por toriles. Ovacionó la primera plaza del mundo a los
subalternos y también a los hombres de a caballo: cuando hay emoción en el
toro, la plata reluce por sí sola.

«Chilista” se llamaba el negro listón primero,
cinqueño, con el guarismo del 2, con un peso de 524 kilos y con el hierro de
Jandilla. Sin fijar la mirada en el capote de Paquirri se mostró el animal, al
que le metió las varas Pedro Genil, empujando en el peto y quedándose fijo
mostrando una buena pelea pero romaneando y cuasi derribándolo en la segunda y
tercera vara. Se empleó el animal en el caballo de Genil. Carlos Chicote entró
en primer lugar en banderillas, que dejó un buen tercer par. Le siguió Carlos
García ante el capote efectivo de Juan Carlos de Alba. «Investigadora”,
número 31, era el cuarto de la tarde, muy serio por delante, segundo del lote
de Paquirri y el animal de su despedida de este ruedo. Alonso Sánchez picó a un
toro que humilló en el capote pero no hizo lo mismo en el caballo. Carlos
Chicote lidió a un animal que banderilleó el propio Paquirri con corrección.

«Hebrea”, también cinqueño y con 527 kilos, era el
segundo de la tarde, bajo, primero del lote de Sebastián Castella. Con
distancia colocó el toro Castella al peto de José Doblado, al que se arrancó
con prontitud, al igual que en la segunda vara que el público captó enseguida
ovacionando. Gran tercio de varas. Quitó por chicuelinas tras el tercio López
Simón. Tiempos le dio al toro Rafael Viotti, midiendo la brega de este toro
para que entrase en primer lugar José Chacón, que dejó un gran segundo par de
banderillas, seguido de Vicente Herrera, efectivo. Fue ovacionado Chacón al
igual que Herrera.

Castaño bragado, otro cinqueño, con un peso de 544 kilos,
era el quinto de la tarde, un toro muy fino y al que Castella le recetó buenas
verónicas de inicio a pesar de que le faltó humillar y tener suavidad en la
embestida. Josele llevó a cabo el quinto tercio de varas de la tarde, en el que
se cayó hasta en dos ocasiones sin cambiarlo la presidencia. José Chacón lidió
al de Jandilla, entrando en el tercio de banderillas por delante Rafael Viotti
y siguiéndolo Vicente Herrera, pero esperó hasta el último instante el
presidente para cambiarlo. De Salvador Domecq fue el sobrero, que dio signos de
descoordinación de los cuartos traseros de salida. Pasador sin más fue el toro,
al que dejó un airoso par de banderillas Viotti en primer lugar tras las varas
irregulares de Josele. Efectivo anduvo Herrera de nuevo ante la lidia de
Chacón, que se llevó suavísimo el toro al burladero.

Alegría mostró también el tercero de salida, un animal al
que le echó el capote López Simón pero la emoción llegó en el tercio de varas,
arrancándose con brío al peto de Tito Sandoval. La virtud del galope, de la
prontitud y de la acometividad mostró en el peto del picador salmantino.
Vicente Osuna lidió al animal, en el que el de Jandilla mostró desparpajo y
vida, ante los pares de Domingo Siro y Jesús Arruga, en todo lo alto y
conectando con el tendido por su limpieza y conectividad. Saludaron tras el
tercio. Como una flecha se arrancó el sexto al caballo de Ángel Rivas, peto en
el que se empleó con fiereza en el primer palo del picador. Otra arrancada
veloz dejó en el segundo encuentro el de Jandilla al caballo. Brillantes
anduvieron sus hombres de plata de nuevo. No terminó de entender López Simón la
condición del animal, en el que dejó detalles sin terminar de conectar con el
tendido. Silenciado.