MADRID

Morante hace un regalo muy especial al doctor Ángel Martín Hernández


jueves 16 diciembre, 2021

Morante de la Puebla ha entregado al doctor Ángel Martín Jiménez un traje de luces obispo y oro que tiene mucha importancia para él.

Morante Angel Toreo
Morante con el doctor. © Instagram

Morante de la Puebla sigue siendo noticia más allá de los que haga en los ruedos. Este miércoles, el doctor Ángel Martín Hernández colgaba una foto en su cuenta de Instagram agradeciendo el detalle que había tenido con él el torero sevillano: un vestido de luces obispo y oro. «Regalos que enamoran, gracias José Antonio Morante, lo tendré en un rincón muy especial de mi casa», comentaba en su red social. Sin duda, un bonito gesto del torero cigarrero ante un amante de la tauromaquia y un ferviente seguidor suyo.

¿Quién es el doctor Ángel Martín al que Morante ha regalado el traje?

Morante
Morante el pasado año en Cuenca. © Emilio Méndez

El Dr. Ángel Martín Jiménez es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Alcalá de Henares, fundador y Director Médico de Clínica Menorca, así como redactor en prensa y revistas especializadas de diversos artículos de medicina y cirugía estética. Ha sido pionero en nuestro país en lipoescultura superficial y es uno de los doctores que más intervenciones de este tipo ha realizado en España. Sin duda un hombre que tiene una gran importancia en dicho campo.

En su dilatada carrera ha tenido que atender a diversos toreros tras sufrir percances en el ruedo, los cuales posteriormente necesitaron de cirugía facial. Ese es el caso de Ángel Teruel, torero madrileño que sufrió una cornada bastante traumática en la plaza de toros de Arles por un astado de la ganadería francesa de Jalabert. Una cornada de pronostico grave en el lado derecho de la cara, de 20 centímetros, que contusionaba y erosionaba la zona frontal del nervio facial derecho, siendo interviniendo por los doctores Lallemant y Rizzoli del Servicio de Cirugía Facial y del Cuello, un percance que posteriormente necesitó de cirugía . Ahí entraba el trabajo de Dr. Ángel Martín Jiménez y todo su equipo, los cuales tuvieron que reconstruir la cicatriz y trabajar para corregir la parálisis facial que sufría. En palabras del propio doctor, «la cornada no tendrá secuelas, aunque sí llevará su tiempo la completa recuperación».

Un ‘ángel del toreo’ especialista en cornadas espejo

Muchos toreros han sufrido cornadas espejo, percances en la cara o en el cuello que reciben ese nombre porque se ven con solo mirarse al espejo. Muchos de ellos optaron por acudir a especialistas para intentar minimizar el impacto visual de las mismas, otros más que por un problema estético acudieron para corregir posibles secuelas derivadas de los percances sufridos. Sin duda la tauromaquia no está exenta de peligro, el riesgo que atañe ponerse delante de un animal bravo siempre está latente; las cornadas, por desgracia, son más habituales de lo que creemos. Cierto es que muchos toreros tienen esas cicatrices como trofeos, secuelas de una batalla delante de un animal fiero que lucha por su vida, esas cicatrices que le dan grandeza a su profesión.

De ahí que muchos médicos, doctores o cirujanos sean admiradores de los toreros, nadie mejor que ellos saben por lo que pasan estos hombres, los cuales se recuperan de una forma, casi milagrosa, de percances que a personas de a pie nos costaría mucho más tiempo. El papel psicológico también es muy importante, muchas veces cuesta más recuperarse mentalmente que físicamente de una cornada grave. Dichos profesionales atienden a muchos toreros, los llegan a conocer e incluso a sorprenderse por la capacidad de recuperación de muchos de ellos, de ahí que surgieran amistades muy profundas entre toreros y especialistas de la medicina. Un claro ejemplo es el que contamos en estas líneas entre Morante de la Puebla y Ángel Martín Jiménez.