CAMPO BRAVO

Aurelio Hernando habla claro: «El encaste Domecq nos ha comido a los minoritarios»


viernes 25 noviembre, 2022

Hablamos con Aurelio Hernando, uno de los ganaderos que guardan el tesoro genético de la casta Veragua en sus fincas de la sierra madrileña.

Aurelio Hernando
Aurelio Hernando, en los corrales de Las Ventas. © Pablo Ramos

En la serranía madrileña pasta una de las ganaderías más especiales de campo bravo, tanto por su pureza de sangre como por ser uno de últimos reductos del encaste Veragua. Su ganadero, Aurelio Hernando cuida con mimo a los animales que pastan en sus fincas, las cuales están perfectamente organizadas según el ganado que tienen. Una zona más ondulada y adehesada para las vacas de vientre y otra con menos arboleda y más plana para los animales de saca.

Queríamos conocer a un ganadero que vive por y para el ganado bravo, uno de esos hombres que lucha por conservar un encaste que únicamente tienen en pureza un ramillete de ganaderos entre los que se encuentran Javier Gallego o Prieto de la Cal. Aquí los toros y novillos del hierro madrileño esperan la llegada de los veedores para encontrar destino de cara a la temporada venidera, en la que deben estar presentes para abrir el abanico de la diversidad.

La amalgama de capas que hay en esta casa es digna de tener la en cuenta, de berrendos a jaboneros pasando por negros y coloraos hasta llegar a algunos castaños. La variedad de capas y accidentes en los pelos de este encaste le da un colorido especial a un encaste que debe acoplarse a los tiempos en los que vivimos.

Aurelio Hernando: «Esta temporada para nosotros ha sido bastante buena»

Ahora toca conocer el balance de 2022 para su ganadero, una temporada con notas positivas dentro de un año nada fácil: «Esta temporada para nosotros ha sido bastante buena. Hemos ido a cuatro o cinco plazas nuevas en las que no habíamos lidiado nunca, entre ellas Teruel, donde nos han dado el premio de la Feria; en Madrid no tuvimos mucha suerte porque llevamos los animales que pasan y algunos se nos pasaron de peso, pero la empresa no ha quedado a disgusto y me han venido a ver novillada para el año que viene, y si tenemos encierro listo, iremos a Madrid».

Pero hubo más notas positivas en un año interesante para la divisa madrileña: «Hemos ido a plazas nuevas como Valdetorres, Santos de la Humosa, Galapagar, la corrida concurso de Villalba… y hemos estado en todas las plazas cumpliendo y funcionando los novillos. Echamos un novillo en la corrida de rejones en Chinchón, y la temporada la verdad que muy bien, porque hemos vendido todo y más».

«Los precios no son los adecuados ahora, porque nos han subido un 40% el pienso»

Aurelio Hernando Toro
Astado de Aurelio Hernando. © Pablo Ramos

Los problemas que sufre el ganadero van más allá de la falta de lluvias o la subida del salario mínimo que aumenta el coste para los ganaderos, el problema es el alto coste que tiene criar un animal bravo: «Los precios no son los adecuados ahora, porque nos han subido un 40% el pienso, y criar los toros y novillos está costando un 40% más. Y los hemos vendido al mismo precio, por lo que hemos perdido un poco de valor en el precio de los animales. Estamos contentos de que los Ayuntamientos hayan gastado más en animales que otros años».

Ahora toca saber cómo se plantea la temporada venidera una vez que los veedores se han dejado caer por casa: «Hay cinco novilladas con caballos y una corrida de toros para Teruel, para lidiar a caballo en la Feria del Ángel, amén de poder ir a Madrid tras quedar todo más o menos hablado con la empresa».

Un camino el que ha tomado Aurelio Hernando de lidiar un mayor número de novillos a toros: «Opto por las novilladas más que por corridas de toros porque mercado aún no tenemos para salir con cinco o seis corridas de toros. Es mejor ir despacio para irse haciendo hueco en las Ferias, y aquí en la Sierra, que es donde nos manejamos, no se dan corridas de toros, sino novilladas. Y en las Ferias no podemos competir con hierros de primer orden. Si a un empresario o a un pueblo le ofreces un ganado u otro, se van a ir a lo que tiene nombre. Nosotros aún no estamos situados para lidiar tantas corridas de toros, y que luego la demanda te lo pida, porque ahora mismo el toro de encaste peculiar no está demandado».

Ganaderos de este cuño han visto disminuido el trozo de tarta en las ferias, digamos que ya los encastes de la rama Domecq les han comido la tostada: «Lo que más sobra son toros de encastes peculiares. Nos han comido el terreno a estos encastes el de Domecq como bien comentabas antes».

«Hay ganaderos que no viven de esto y nos quitan el mercado»

Toros Aurelio
Dos toros de Aurelio Hernando. © Pablo Ramos

«Hay ganaderos que no viven de esto y nos quitan el mercado, o nos lo han quitado desde hace tiempo. Los ganaderos de estos encastes son los que le sobran toros. Le sobran más toros a estos que a los otros» nos contaba Aurelio sobre los gustos de las empresas en referencia a los encastes que hay en el campo bravo.

Un camino nada fácil el que tienen por delante hierros de esta procedencia: «Así es, a ver si la gente se va aficionando y va sabiendo lo que es un toro de una cosa o de otra, porque la gente sabe quién es Morante y los cuatro famosos. Ahora, en los carteles, el nombre de la ganadería casi no se ve. Vamos perdiendo protagonismo».