Mucho jugo se le pudo sacar a la charla que tuvo Alejandro Talavante con los socios de la Asociación El Toro de Madrid el pasado 24 de febrero. Casi dos horas en las que el torero pacense no rehuyó ninguna pregunta y se abrió para expresar su forma de ver el toreo. Madrid y Talavante han ido siempre de la mano. Innumerables faenas, triunfos incontestables y alguna que otra decepción. Aquí no valen medias tintas.
Se le preguntó sobre su compromiso con Las Ventas, ese que nunca nadie puso en duda. Alejandro no saldó con triunfo ninguna de sus dos encerronas en Las Ventas, otra cosa es si interiormente saliera satisfecho pese a no tener ese triunfo buscado. Eso solo lo sabe el propio torero. Madrid pesa una enormidad, lidies seis, tres o dos toros; eso es incuestionable. Por ahí vino la pregunta de uno de los socios de la asociación.
Maestro, Madrid es una plaza que pesa muchísimo. ¿Siente esa presión cada vez que trenza el paseíllo en las Ventas?
«En Madrid pesa anunciarte siempre, en cualquier tipo de corrida. Sí es cierto que cuando te rompes con un toro no hace falta más. Entiendo que a veces lo de las encerronas puede llegar a ser un espectáculo pesado y de mucha responsabilidad, al cual le doy mucho mérito, pero igual de mérito tiene estar anunciado cuatro tardes en Madrid y creo que siempre la plaza de Madrid pesa en cualquier corrida que te anuncies. No hay ninguna corrida en la que no haya sentido el peso de la responsabilidad por el nivel que quiero ofrecer», señaló Talavante.
Las encerronas de la carrera de Alejandro Talavante
Desde que tomara la alternativa el 9 de junio de 2006 en Cehegín (Murcia) de manos de Morante de la Puebla y David Fandila ‘El Fandi’ y toros de Benjumea, la carrera del extremeño Alejandro Talavante ha estado unida a las figuras del toreo. Con un inicio de 2007 espectacular en el que enlazó Puerta Grande en Valencia por Fallas, en Madrid en Resurrección y una del Príncipe en Sevilla se colocó en un sitio privilegiado. Un torero que cuenta en sus más de 15 años de alternativa con seis tardes en las que se enfrentó en solitario a seis astados. Madrid en dos ocasiones, Zafra, Mérida y Málaga fueron las plazas elegidas por el genial torero extremeño.
La primera fue un Domingo de Resurrección en la plaza de toros de las Ventas. La corrida fue completa de Cuvillo, pero el triunfo no llegó. Corría el 2009 y el extremeño pese a su fulgurante comienzo como matador de toros atravesaba un bache del que saldría más adelante. Tarde en la que decepcionó el ganado de Núñez del Cuvillo, una divisa que a lo largo de la carrera de Talavante se la gha dado infinidad de triunfos.
Dos años después vendría Zafra, una corrida en la que se lidiaron astados de Victoriano del Río, Cayetano Muñoz, Garcigrande, Daniel Ruíz, Zalduendo, Núñez del Cuvillo y un sobrero de regalo en séptimo lugar nuevamente con el hierro de Zalduendo. El diestro extremeño cortaría nueve orejas y un rabo en una tarde de gran toreo y en el que los toros seleccionados dieron un buen juego y propiciaron que se viera una gran versión del torero pacense.
Volvería a Madrid en 2013 para lidiar en solitario una corrida de Victorino Martín la cual no acabaría en triunfo como era el deseo de una afición que colgó el ‘No hay Billetes’ en aquel 18 de mayo. El diestro extremeño solo logró una ovación en una tarde marcada por la nula emoción de los astados en la que lo mejor lo hizo en el el tercer acto, faena en la que pudo cortar una oreja pero la espada le privó de tocar premio en una tarde de escasas opciones.
Ese mismo año año había programado un mano a mano entre Morante de la Puebla y Alejandro Talavante en Mérida, pero una cornada en Huesca dejaría en fuera de juego al torero sevillano. Apostó Talavante por encerrarse con seis toros de Zalduendo en una tarde que acabaría en apoteosis. Fue un 1 de septiembre con las cámaras de TVE1 en directo. Cotaría un total de seis orejas y un rabo en una tarde en la que se ganó la vida la vida ‘Taco’, un toro de gran clase y entrega al que toreó de forma formidable Alejandro. Una tarde sin duda para el recuerdo la vivida en la localidad extremeña
Dos años después cerraría, hasta el momento, sus encerronas con un festejo muy especial en la plaza de toros de Málaga. Fue en la corrida Picassiana que cada año se celebra en la Malagueta. Se lidiaron toros de Fuente Ymbro, Victoriano del Río, Jandilla, Garcigrande, La Quinta y Torreherberos. Una tarde en la que desplegó parte de su repertorio un Talavante que cuajó a placer a un interesante toro de Garcigrande al que le cortó las dos orejas. Un festejo en el que el ganado no ayudó pero en el que se vio a un Talavante por encima de los elementos.
