Otro de los nombres que componen este Alfarero de Oro es el de Cristian Pérez, el novillo de Hellín trenzará el paseíllo en el desafío ganadero entre las divisas de Dolores Aguirre y San Martín. Novillero que en agosto de 2017 protagonizó una huelga de hambre delante de la de la Plaza de Toros de Albacete reclamando una oportunidad para torear en esa feria tras triunfar en 2013 y 2014.
En 2016 se proclamó triunfador del IV Bolsín Taurino Tierras de Zamora un mes antes de participar en el Bolsín ‘Nimes Métropole‘, donde indultó un novillo de Jalabert. Tras debutar con caballos en su plaza en 2016 y cortar una oreja de peso comenzó su andadura con caballos, esa que le ha llevado a ir entrado en varias ferias de novilladas. Se presentó en Las Ventas el cinco de mayo del 2019 dando una vuelta al ruedo como premio a la tarde. En este 2022 ha toreado tres novilladas, una en Vic Fezensac, otra el Almorox y la más reciente en Calasparra.
Queríamos hablar con él, saber cómo llega a la tarde del próximo sábado, una novillada con dos hierros de gran solera en el campo bravo. Antes hará su tercer paseíllo del año en su tierra ante una novillada de Los Chospes, dos tardes claves que pueden suponer un antes y un después en su carrera, más si cabe cuando el triunfo no llegó el pasado 5 de septiembre con los de Saltillo en Calasparra.
Una cita importantísima en un momento clave para el devenir de su carrera en la que la preparación ha debido ser clave: «La verdad que la preparación viene siendo como todo el año, pero cuando llega un compromiso tan importante uno intenta darle una vuelta de rosca a la preparación tanto física como mentalmente. Es mi gran bala este mes de septiembre: es el mes más esperado para los novilleros, y más en la situación como la mía. Tengo fechas muy importantes en ferias como Villaseca o Albacete, y fechas en las que no puede fallar».
Una tarde en la que hay un interesante desafío ganadero entre los hierros de Dolores Aguirre y San Martín, dos ganaderías exigentes, pero con buen fondo: «Al fin y al cabo, es una motivación especial por la dificultad que tiene triunfar con este tipo de ganaderías más exigentes, pero la motivación es grande. Sabes que un triunfo así tiene una motivación mayor, y más en una feria de gran relevancia».
Tras debutar con caballos en Albacete en su feria de 2016, ya son seis años inmerso en el escalafón, un largo periodo en el que la alternativa tiene que atisbarse en el horizonte: «Si Dios quiere, está más cerca que tarde. Ahora mismo, pienso en el día a día, en todos los compromisos importantes que tengo. Mi objetivo a corto plazo es ella. La alternativa es un día muy especial y una tierra que me ha acogido mucho es Francia, no me mojo en el sitio».