CAMPO BRAVO

Toros bravos y linces ibéricos: ¿Cómo contribuye la raza de lidia a la proliferación de este felino?


domingo 29 enero, 2023

El toro bravo ayuda a la conservación de especies en peligro de extinción, y entre ellas está el lince ibérico. La finca toledana de Conde de Mayalde es un claro ejemplo de ello.

Lince Toros
Un lince entre novillos bravos en la ganadería toledana de Conde de Mayalde. © Joaquín Romera

En España, las ganaderías bravas ocupan medio millón de hectáreas en las que coexisten varias especies de animales. En los alrededores de estas explotaciones ganaderas existen diversos programas de conservación de especies en peligro de extinción, como bien se demuestra en el último estudio realizado por la Unión de Criadores de Toros de Lidia – UCTL. Éstas se rodean de especies protegidas como lobos ibéricos, águilas imperiales e ibéricas, cigüeñas negras y linces ibéricos, entre otras, que encuentran refugio tras esa presencia tan intimidante que le caracteriza al toro bravo.

Hoy nos centraremos en el lince ibérico, que actualmente llega a los 1.365 linces distribuidos en 13 núcleos de poblaciones en nuestra Península Ibérica. Andalucía es la comunidad con más población de linces con 520 felinos aproximadamente, seguida de Castila La Mancha con 475 y Extremadura con unos 165. Especialmente, en los Montes de Toledo se concentra el mayor número de linces ibéricos, alcanzando los 221 de los cuales 117 son adultos (42 son hembras), según los datos del 2021 en el citado estudio de la UCTL.

Algunas de las ganaderías de Castilla-La Mancha han podido presenciar entre sus toros a esta especie y entre ellas está la ganadería Conde de Mayalde, en la finca El Castañar, que se localiza en Mazarambroz, Toledo. Dicha finca, forma parte de la Red Natura 2000, que es una red de áreas de conservación de la biodiversidad en la Unión Europea, en Castilla-La Mancha al estar incluida en el LIC-ZEPA de Montes de Toledo.

Rafael Finat ofreció al programa Life-Iberlince poder realizar las sueltas de los ejemplares criados en cautividad en una parte de sus 5.000 hectárea

Becerro Mayalde
Becerro bravo en la finca de Conde de Mayalde, donde vive también el lince en libertad. © Pablo Ramos

El programa Life-Iberlince se encarga de la crianza y puesta en libertad de estos animales, también vigilan su adaptación y supervivencia en su nuevo hábitat. Un gran ejemplo de ello es la puesta en libertad de tres linces, dos machos y una hembra llamados Kentaro, Khan y Kuna -esta última fue madre de cuatro cachorros-. Este momento ocurrió en el 2014 en los Montes de Toledo, donde convivían los toros toledanos con los jóvenes linces en el mismo ecosistema, la dehesa que está entre los denominados «sistemas agrarios de elevado valor de conservación» (Suárez et al.,1997) y el reconocimiento institucional-naturalístico de buena parte de sus territorios.

Testigo y partícipe de esta convivencia es Rafael Finat, ganadero de Conde de Mayalde, que ofreció al programa Life-Iberlince poder realizar las sueltas de los ejemplares criados en cautividad en una parte de sus 5.000 hectáreas. Otra parte la tiene dedicada al cultivo para así atraer a conejos, este animal entra dentro de la cadena alimenticia del lince ibérico y también los pájaros. El ofrecimiento del ganadero, desde hace años, siempre ha sido desinteresado, sin subvenciones por parte del Gobierno y no solo ha participado en este proyecto, sino también en varios otros de conservación.

El propio ganadero vio en el pasado cómo se cazaban en la propia finca esta especie por entonces considerada cinegética y ahora colabora para la supervivencia de los propios linces. Rafael Finat lo cuenta a Cultoro: «Como no suele haber gente en las ganaderías y en las vacadas en general pues es un paraíso, tanto para el lince como para las especies protegidas. Es una convivencia muy buena, en la ganadería se sienten tranquilos. En estas zonas de ganado bravo hay varios individuos y ya ha habido varias sueltas. Ahora hay algunas hembras y machos sueltos, pero de las primeras veces que se soltaron fue en el año 2014. La verdad que conviven perfectamente, al igual que con el conejo, por ejemplo, porque es una ganadería extensiva».  

Una zona referente para la recuperación del lince ibérico gracias a la crianza del toro de lidia

Mayalde
Un toro de Conde de Mayalde de la pasada temporada en su finca. © Pablo Ramos

Por tanto, ha conseguido ser una zona referente para la recuperación del lince ibérico consiguiendo reproducirse en libertad. Conviven en la finca El Castañar no solo esta especie sino también el águila imperial ibérica que cuenta con más nidos que en el Parque Nacional de Cabañeros, venados, muflones, corzos, jabalíes…

Así, los toros bravos ayudan a prevenir la desaparición de estos animales con el simple hecho de su existencia debido a que forman y protegen la biodiversidad de la flora y la fauna autóctona. Siendo, por lo tanto, un pilar fundamental del sistema medioambiental español.