Hace un año, los toros de El Pilar dieron uno de los juegos más interesantes del ciclo madrileño. Por eso este año regresan con muy buen cartel, pues su presentación siempre es garantía y su comportamiento, a poco que se parezca al del año pasado, no debería dejar indiferente a nadie.
Moisés Fraile es uno de esos ganaderos a carta cabal, de los que no les gusta hablar de más, pero tampoco de menos. El criador salmantino sabe que su prestigio se juega tarde a tarde, plaza a plaza, y que nunca depende ya de él cuando los toros están en el camión.
Por eso, cuando recibió nuestra llamada, lo hizo con la tranquilidad que dan los deberes hechos. “Ya hemos cumplido con lo nuestro, sólo queda esperar que todo salga bien. Enviamos ocho toros, los que consideramos que podrían ser la mejor corrida para Madrid, de los que pasaron tres y uno quedó condicionado. Luego embarcamos otros cuatro, de los que deberá salir la corrida completa. Para Madrid siempre tienes que tener al menos dos corridas de toros, para poder lidiar una”.
A estas alturas, a Moisés no le va a quitar el sueño que le echen un toro para atrás. “Ya sabes cómo es esto, los veterinarios tomarán las decisiones que correspondan, pero en el campo hemos preparado la corrida teniendo en cuenta las exigencias de esta plaza. Por eso dejamos que los toros tuvieran su mejor desarrollo, son casi todos cinqueños y de los sementales más contrastados que tenemos. Es una corrida muy buena, ojalá se pueda lidiar completa”.
Aunque muchos aficionados, a través de las redes sociales, habían manifestado el deseo de ver los toros de El Pilar en El Batán, ha sido el propio ganadero quien pidió no ir. “Tengo que decir que a mí si me hablaron de llevar los toros a El Batán, pero no lo consideré oportuno, dije que prefería no llevarlos y respetaron mi opinión”.
