Cuando se sienten dos pasiones, los caminos siempre tienden a unirse. Eso es lo que le ha sucedido a José David Bracho Villalón (Antequera, 1974), que desde siempre se ha sentido atraído a partes iguales por el mundo del toro y el de la fotografía.
Acudir con su cámara fotográfica a los festejos taurinos comenzaba a ser en la juventud una forma de experimentar, de sacar el máximo partido a los objetivos, para inmortalizar las faenas de sus admirados maestros del toreo.
La plaza de toros de su localidad fue el laboratorio del que, cual alquimista, fueron saliendo las primeras pruebas fallidas hasta alcanzar importantes cotas dentro del panorama fotográfico taurino; donde hoy en día está muy cualificado.
Comenzaba, de este modo, a ser reclamado por diferentes medios de comunicación, primero con el semanario local ‘La Crónica’, la Opinión de Málaga, para continuar con otras colaboraciones en portales especializados como Mundotoro o Cultoro, Aplausos, entre otros.
Daniel Herrera Checa. Periodista taurino. Desde el pasado año, forma parte como fotógrafo titular del proyecto Málaga Taurina, desde el que realiza un recorrido por todas las plazas de la provincia; acercando a los aficionados todo lo que acontece en este mundo, cada vez más alejado del papel.
Pero no sólo es desde el burladero desde donde goza David Bracho de hacer grandes fotografías. También el campo, con su intimismo y su liturgia, es espacio propicio para difundir esta faceta de la Fiesta restringida a unos pocos privilegiados.
Su compromiso con la Tauromaquia y la fotografía le hace participar de forma activa en diferentes colectivos como son la Asociación de Aficionados Prácticos de Antequera (APTA), de la que es uno de sus fundadores, así como a participar en encuentros con la Asociación Nacional de Fotógrafos Taurinos, de la que forma parte.
En sus últimos reportajes, la fotografía informativa ha dejado lugar a búsqueda de detalles, ángulos imposibles y momentos irrepetibles que forman parte de esta ‘Tauromagia’ que nos presenta la Diputación Provincial de Málaga de la mano de su Escuela Taurina, con la que también colabora asiduamente.
Una selección de 30 fotografías tratadas en escala de grises nos representa esa Fiesta Taurina en blanco y negro. Tal cual, sin artificios, con la naturalidad que tanto prima en el toreo. Como su admirado Morante, encontramos un David Bracho en su más pura esencia. Echando la pata ‘palante’, sin más verdad que su cámara Canon y sus objetivos cual capote y muleta.
El resultado hoy a las 13.30 horas, como pueden comprobar, es de Puerta Grande.