ENTREVISTA

Salvador Gavira García no se calla sobre los precios que algunos ganaderos ponen a sus toros: «Flaco favor nos hacen»


sábado 12 noviembre, 2022

Salvador Gavira García es un ganadero romántico que cría sus toros en la La Isla de Vega Blanquilla y no se calló en los micrófonos de El Toril: "Los ganaderos líderes del escalafón tienen la obligación de vender más caros los toros para que los que lidiamos menos podamos sobrevivir".

Gavira Garcia
Salvador Gavira García enseñando sus toros. © Javier Bocanegra

Con la bajada del telón de la temporada se empieza hacer balance de lo ocurrido desde el comienzo de ésta. El pasado domingo 6 de noviembre los compañeros de El Toril, de Onda Madrid, entrevistaban a uno de esos ganaderos que no se suele morder la lengua cuando habla, un hombre que defiende a capa y espada a los ganaderos humildes y que lleva a gala la sangre que corre por las venas de sus animales. Se trata de Salvador Gavira García, un gaditano romántico que cría sus toros en la La Isla de Vega Blanquilla, un paraje único enclavado en una zona de gran valor ecológico. Un lugar donde su padre mantuvo su sueño ganadero junto a ‘Soto de Roma’ la joya de la Corona, una finca enclavada en el el Parque Natural de Los Alcornocales.

«Estoy tremendamente ilusionado con lo que tengo en casa. Necesitamos espejos donde mirarnos y para mí Ricardo Gallardo o Victoriano de Río son dos de ellos. Las corridas de Almorox y Soria me reafirmaron que voy por el camino correcto. También en los festejos menores pude ver cosas positivas. Creo que poco a poco vamos escalando, ahora hay que dar golpes en plazas de mayor relevancia, en ello estoy ahora» comentaba Salvador Gavira respecto a el momento que vive su ganadería.

«Los ganaderos líderes del escalafón tienen la obligación de vender más caros los toros»

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Un toro de Gavira. © Torofusión

Una pandemia que ha dado un golpe durísimo a los ganaderos de bravo pero que ha servido para poder apretar una tuerca más y sacar nuevos productos. «Como bien dices, la pandemia ha servido para meter toros y novillos en la plaza e intentar acortar plazos, al no poder lidiarlos en las plazas pues lo hacías en casa. Yo he aprobado tres sementales que me van a cambiar la vida. Ahora tengo total libertad para tomar las decisiones que crea oportunas y eso me hace ser yo mismo».

Pero existe la problemática de las ferias, los carteles cerrados y las ganaderías escogidas de ante mano, algo que por otro lado ha pasado siempre. Ganaderos que no pueden acceder a ellas por el encorsetamiento de dichas ferias. «Yo estuve en todas las ligas, me he visto en todas las ferias, pero también fuera de ellas, aquí nadie regala nada eso que lo tengan claro los oyentes. Hace años me decía Eduardo Miura, «cuando uno tiene una factoría de toros se te pone cara de estar a sueldo de alguien» y eso es malo, por ello los ganaderos líderes del escalafón tienen la obligación de vender más caros los toros para que los que lidiamos menos podamos sobrevivir; de lo contrario flaco favor le están haciendo a sus compañeros».

Salvador Gavira García: «Tengo entre 40 y 50 toros para 2023»

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«Yo tengo entre 40-50 toros para 2023, pero la decisión es saber si vas a invertir en ellos o no, porque de nada vale tenerlos si sabes que no vas a lidiarlos. Si te pagan entre 2500 y 3000€ en una plaza y en las calles el precio es mayor no hace falta que te diga a quien le vendemos. Ser ganadero ya no es un medio de vida, y mis compañeros, al menos por responsabilidad, deberían ayudar al que está en otro escalón. A mí personalmente esa responsabilidad me está faltando» contaba el ganadero gaditano en el programa El Toril.

«En el mundo de las ganaderías existe un libre mercado, cada uno pone el precio que cree razonable, aquí no pasa como con los toreros en los que hay unos mínimos establecidos. Fíjate que triste que en un abono como en el de Sevilla haya ganaderos que hagan dobletes y tripletes, eso no ayuda en nada, ¡qué pena!».

Los ganaderos están cansados de ver como sus animales se quedan en el campo y la única salida son los festejos populares, hombrees como Gavira aún resisten con las plumas en la cabeza: «Las 100 corridas de Morante han devuelto la esperanza a muchos ganaderos. No es el gesto de las 100, sino de la oportunidad dada a muchas ganaderías olvidadas. Las ha vuelto a poner en valor, y eso creo que hay que agradecérselo enormemente porque la carga genética que va al matadero no vuelve, y no se puede perder esa riqueza de sangres que da la variedad».