CAMPO BRAVO

Le quitan las fundas a un toro de Domínguez Camacho y se la ‘forma’ al resto de la camada al sentirse más fuerte


domingo 18 febrero, 2024

Una de las faenas más delicadas del campo bravo por el riesgo que conlleva para los animales, como así muestra este vídeo.

Domínguez Camacho
Serio toro de Domínguez Camacho.

El toro bravo es un animal milenario que con el paso del tiempo ha ido evolucionando al que ahora conocemos. Al contrario que otros animales, éste no lucha para alimentarse y sí para mantener su estatus en la manada, por ello hay que tener mucho cuidado y estar ojo avizor si hay cambios de tiempo o se atisba pelea entre los animales de un mismo cercado.

El animal bravo es muy sensible a los cambios, acusando en muchas ocasiones un exceso de manejo. De todas las faenas que hay en el campo bravo una de las más delicadas son el cambio de fundas a los animales de saca. Los astados están fuertes y se miden constantemente, algo que provoca la inquietud de ganaderos y responsables de campo al poder acabar todo con la baja de alguno de los animales que se vieran implicados en una pelea.

En la ganadería onubense de Domínguez Camacho, procedencia Marqués de Domecq, los animales están inquietos, y en cualquier momento puede saltar la chispa. El ganadero lo sabe, de ahí que uno de ellos tenga que ser sacado del cercado, es el único que no tiene fundas, es decir, el animal que más daño puede hacer si tras la comida se desata la batalla. La llegada de los mansos tranquiliza a unos animales que saben que uno de sus compañeros tiene unas armas que ellos no pueden utilizar, de ahí que no quieran darle la cara, siendo conscientes que sus astas no dañan como las de su hermanos de cama.

De originarse una pelea este animal tiene las de ganar al estar libre de fundas, por ello se siente poderoso, sabe que los otros le temen, de ahí que sea fundamental apartarlo de sus hermanos. Las rencillas o cuentas pendientes del pasado pueden hacer que la pelea esté más cerca de lo que creemos, de ahí que toda precaución sea poca. Con la llegada del buen tiempo proliferan las peleas, el animal se siente fuerte y ahí es cuando la paz se rompe sin previo aviso.

Por suerte no hubo que lamentar ningún enfrentamiento entre los toros más fuertes de la camada. En esta casa ganadera los mansos son muy particulares ya que no son de raza berrenda. Animales astifinos que dan miedo son su sola presencia pese a que no tienen sangre brava. Para bregar con los animales bravos es siempre importante tener mansos de gran alzada para que mantener a raya a este tipo de animales que se crían en Cumbres Mayores.