No son momentos fáciles para hacerse ganaderos de bravo tal y como está la situación actualmente con la subida de las materias primas debido a la inflación. Pese a ello son muchos los ganaderos de bravo que siguen adelante con la tarea de seguir preservando la bravura de estos animales. El sueño de conseguir ese animal que tiene uno en la cabeza y el poder verlo embestir en un ruedo es algo que está por encima de todos esos sinsabores y momentos duros que se viven a diario en el campo.
Dos de las figuras más representativas en este campo son José Miguel Arroyo ‘Joselito’ y Martín Arranz. Ambos tienen bien ganado su sitio en la Fiesta, uno de ellos como apoderado y el otro como matador de toros de renombre, los cuales también tomaron la decisión de hacerse ganaderos de bravo. Pese a seguir apostando por el toro en el campo y su cría para la plaza, ambos siguieron vinculados con otras facetas dentro de este mundo.
Como muchos otros ganaderos, Joselito y Arranz también vendieron ganado a terceros, formando estos su vacada gracias a esa adquisición. Uno de ellos fue Juan Antonio Alonso quien adquirió simiente para crear su propia ganadería en su finca ‘El Puntal’, explotación ganadera que le ha dado nombre a este hierro de nuevo cuño. “Yo tengo la ganadería de bravo desde hace un par de años; antes era por ocio y ahora me he dado de alta en la Asociación de Ganaderías de Lidia” explicó a este medio el propio Alonso.
“Comencé el proyecto adquiriendo vacas procedentes de Las Ramblas, que se las compré a una ganadera de Murcia, El Tajo-La Reina, y otras de Sánchez Urbina. Todo es Domecq vía Jandilla, Salvador Domecq y Marqués de Domecq”. Una vacada que tiene personalidad propia, un hierro que ha conseguido ir puliendo poco a poco tres líneas ganaderas con gran relación entre ellas pero con toques distintivos de cada ganadero al que fueron a buscar la citada simiente.
Dentro de esta joven vacada hay una sangre que ilusiona sobremanera a su ganadero, es esa la que proviene de José Miguel Arroyo Joselito, espada al que admiraba dentro del ruedo y un ganadero que había conseguido que su toro tuviera esas características que él buscaba cuando se ponía delante de un animal bravo. Una rama dentro del encaste Domecq que le da muchas variantes genéticas este hiero de nuevo cuño, ese que tiene en su casa varias de las líneas genéticas más importantes de divisas tan relevantes como Luis Algarra, El Torero, Jandilla o Daniel Ruiz.
Por otro lado, ya en el año 2022 el ganadero y político peruano D. Alfredo Barnechea le compró a Martín Arranz -padre adoptivo de Joselito- su hierro y los derechos de éste para formar su nueva vacada en España anunciándola como ‘Toros de la Conquista’, tras modificar el citado hierro por el que actualmente utiliza, tal y como narramos en un reciente reportaje en este medio.