El pasado invierno hablábamos en este medio sobre la creación de un nuevo proyecto ganadero asentado en Castilla-La Mancha, concretamente en el término municipal de Añover de Tajo. Allí en la finca ‘El Lucero’ Alfredo Ruano González, un joven de 29 años de edad, lucha por sacar adelante un proyecto ganadero con dos sangres muy definidas. La primera de ellas es pura Casta Navarra, teniendo el segundo de los hierros procedencia Cuvillo.
“Mi padre falleció en 2018 y como teníamos esa finca he ido criando animales allí. Es una gran apuesta, ojalá pueda ir lidiando poco a poco mis animales y que vayan saliendo como yo espero. De Cuvillo adquirí 50 vacas y un semental en 2019, un tipo de toro que me llena como aficionado”, comentó a este medio el pasado invierno. Pero ahí no se quedó su apuesta, hace unos meses también ejerció la opción de compra que tenía sobre una veintena de vacas del hierro navarro de Arriazu, en este caso para lidiarlo en algunos pueblos de la provincia de Toledo en varias capeas.
Al contrario que el ganado para lidia a pie, esta sangre Navarra tuvo como destino alimentar la afición de varios pueblos de La Sagra durante sus fiestas patronales a celebrar los meses de agosto y septiembre. Como dato a tener en cuenta, es la primera vez que la zona centro de España se puede disfrutar de estas vacas, esas que normalmente tenían su salida en la zona de Navarra y Aragón. Por el momento han sido varios municipios aquellos que han apostado por un tipo de animal con personalidad propia.
Se trata de animales de pequeño tamaño y escaso peso (brevilíneas y elipométricas) aleonadas, la cabeza es chata y más bien pequeña, ojos saltones y grandes, la mirada viva, cuello corto y ancho como bien nos explican las fuentes consultadas. Suelen ser ejemplares veletos y de astas cortas, dándose en la mayoría de los casos forma de lira y de color caramelo. Otro dato interesante es su pelaje, destacando las coloradas con todas las variedades pese a existir también ejemplares negros.
Alfredo Ruano siempre ha tenido pasión por el toro bravo, más si cabe cuando hace más de 15 años su padre levantó una plaza de tientas en la finca familiar, lugar donde realiza capeas para sus amigos y familiares, algo que cambió radicalmente tras el fallecimiento de su padre, momento en el que cambió su vida por completo. Ahora disfruta de su pasión por el toro bravo con estas dos sangres que ocupan gran parte de su día a día.
