Como ya hemos contado en varias ocasiones en este medio, cada vez son más los ganaderos mexicanos que optan por adquirir simiente española para refrescar su ganadería o empezar un proyecto ganadero desde cero. Si lustros atrás se buscaban animales de la rama Santa Coloma y Saltillo, ahora son varias las vacadas que se han nutrido de sangre Parladé (dentro del encaste Vistehermosa) vía Torrestrella, Jandilla, Juan Pedro Domecq, Victoriano del Río o Álvaro Núñez, entre otras.
Pese a ello el campo bravo mexicano también se ha nutrido otras sangres relevantes dentro del campo bravo español, esas que sirvieron para asentar estos encastes allende los mares. Atanasio Fernández (Barralva), Gamero Cívico vía Samuel Flores (Rancho Seco), Murube (Rancho Seco), Santa Coloma-Buendía vía La Quinta, Los Camino y Flor de Jara (Marrón, Xajay, Arroyo Zarco o Rancho Seco) o Domecq vía Victoriano del Río (Fernando de la Mora, San Fernando y San Diego de los Padres), esta última también con simiente de D. Álvaro Núñez.
Estas ganaderías, durante muchos años, se nutrieron de sangre venida de este lado del charco tras la compra de pajuelas. Según comentó en una entrevista Juan Pedro Domecq Morenés, uno de los animales que impregnó con su llamativo pelaje a un gran número de vacadas americanas fue el 120 Gracioso, ejemplar melocotón hijo del 40 Ilusión que José Miguel Arroyo ‘Joselito’ le compró como semental a Juan Pedro Domecq Solís. Tras dar muy buenos resultados en su casa, el espada madrileño le sacaría pajuelas que vendería al otro lado del charco.
Con la apertura de las fronteras y la necesidad de encontrar sangre nueva que aportar a sus ganaderías, vacadas como Fernando de la Mora, San Fernando o San Diego de los Padres han llamado a la puerta de uno de los criadores de bravo más importantes de España. Se trata de Victoriano del Río, criador de bravo que no vio con malos la venta de simiente de su propia vacada a ganaderos mexicanos.
20 vacas y dos machos de Victoriano del Río que volaron a México
Desde ‘El Palomar’ en San Agustín de Guadalix salieron veinte vacas y dos machos con destino México, animales que servirían para cimentar los proyectos ganaderos de la familia Pérez Salazar y la familia Gutiérrez, esta última también con simiente procedente de la vacada portuguesa de Álvaro Núñez como bien comentó el ganadero sevillano a este medio. Un sueño ganadero que poco a poco va teniendo resultados satisfactorios en las primeras tientas.
Amén de esos dos hierros la propia vacada de Victoriano del Río publicó en sus redes una información que confirmaba esta noticia publicada el pasado 4 de diciembre por esta redacción: «Qué orgullo el arranque de los animales de Victoriano del Río en México. A partir de la bravura y de la pureza de sangres, confiamos que comience una nueva línea en México. Ganadería D. Fernando de la Mora y Ganadería San Fernando».
Que orgullo el arranque de los animales de Victoriano del Río en México. A partir de la bravura y de la pureza de sangres, confiamos que comience una nueva línea en México.
Ganaderia D. Fernando de la Mora y Ganadería San Fernando. pic.twitter.com/f5eJC8Dcx9— Victoriano del Río (@PRGtoros) December 4, 2024