Morante de la Puebla, Emilio de Justo y Pablo Aguado trenzaban, en la tarde de este viernes, el paseíllo en la sexta de la Feria de la Magdalena de Castellón. Se lidiaba un encierro de Juan Pedro Domecq.
Una oreja paseó Morante en el primero, un animal que cumplió bien en la primera vara que tomó. Animal noble, pero justo de fuerza y raza. José Antonio hizo una obra de mucho temple y suavidad, con momentos muy bellos por ambos lados. Remató la obra de una gran estocada, lo que le valió el apéndice.
Emilio de Justo perdió la oreja del segundo por su fallo a espadas. Cumplió el animal en el caballo en el único puyazo que tomó. Le faltó clase al animal, ya que calamocheaba en algunos momentos y eso produjo algunos enganchones del diestro, que se entregó e intentó estar bien colocado en toda la obra. Dejó algún muletazo suelto de bella factura en la faena, pero le faltó tomar vuelo final al conjunto de la obra. Silencio al toro en el arrastre y ovación al cacereño.
Dos orejas paseó Pablo Aguado del tercero, un animal manso en los primeros tercios y al que luego el torero lo sujetó bien en la muleta. El astado tuvo repetición y ritmo en la embestida; el diestro lo entendió al a perfección, con un inicio de faena primoroso rodilla en tierra. Tras ello, llegaron derechazos y naturales soberbios, con una cadencia y una clase extraordinarias. Tras una estocada un punto caída, paseó el doble premio.
Pinceladas dejó Morante en el cuarto en una tarde que se puso más desagradable aún por la lluvia, con el tendido más incómodo por el agua. El animal tuvo cierta nobleza pero le faltó emoción y transmisión. Hubo momentos de entrega del torero cigarrero, incluso echándose rodilla en tierra. Mató de media estocada y descabello. Silencio para el toro y ovación para el torero.
Emilio de Justo lo intentó e insistió con el quinto, pero fue un toro soso y sin ninguna transmisión. La gente ya estaba muy fría y el ruedo cada vez estaba peor. El animal, descastado, no dio opción alguna.
Pablo Aguado, con la lluvia arreciando en el sexto, perdió la oreja por la espada tras una buena obra y un bello inicio de obra flexionando la rodilla. Destacó el temple, la naturalidad y la personalidad de su toreo ante un humillador y noble astado de Juan Pedro.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Castellón. Sexta de la Feria de la Magdalena. Corrida de toros. Tres cuartos de entrada en tarde lluviosa.
Toros de Juan Pedro Domecq.
Morante de la Puebla, oreja y ovación.
Emilio de Justo, ovación y silencio.
Pablo Aguado, dos orejas y palmas.
FOTOGALERÍA: J J DIAGO
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