El periodista David Casas entrevistó el pasado 11 de noviembre en su programa Espacio Toro de RNE a uno de los ganaderos más importantes del escalafón, Adolfo Martín, criador de procedencia Albaserrada, que habló alto y claro sobre los temas que normalmente no suele conocer la opinión pública y que quiso ponerlos sobre la mesa.
Una conversación en la salieron a la palestra temas como la viabilidad de una explotación se puso sobre la mesa, más si cabe tras una dura pandemia y una subida alarmante de los costes de producción. Adolfo Martín no se mordió la lengua para llamar a las cosas por su nombre en una entrevista sincera y muy esclarecedora: habló del precio del toro y del dinero por el que él defiende una corrida en unos momentos difíciles en los que hay que mantenerse firmes para no bajar el precio de los animales, ese que siempre ha defendido Adolfo.
Adolfo Martín: «Tengo la suerte de que la gente que viene ofreciendo algo que es de risa, no viene a mi casa»
El respeto al ganadero es algo que se está poniendo en cuestión y tras la pregunta por parte de Casas del precio estimado por toro (4.000€) el ganadero cacereño contestó sin titubear: «Criar un toro vale más. Esta es la ley de la oferta y la demanda. Nosotros lo hemos pasado mal, los que peor lo hemos pasado de la tauromaquia. Soy una persona que intento defender mi parcela, mi caché, y donde no, no voy. Y punto. Entiendo que ahora mismo todo el mundo intenta apretar, es normal que los empresarios tiren a su parcela… pero yo tengo la suerte de que la gente que viene ofreciendo algo que es de risa, no viene a mi casa. Y me ahorro el berrinche. Y si te hacen una oferta malísima, te dicen que no. Para poderte defender, una corrida de toros tiene que ser mínimo con 30.000 euros».
Una pandemia que ha sacado las costuras de un sector que en muchos momentos no ha sabido reaccionar y adelantarse a ciertas circunstancias que estaban por venir. Adolfo lo tiene claro: conoce su casa como nadie y por suerte, en momentos de extrema dificultad, el campo ayudó a no ponerle la soga al cuello al ganadero: «Aquí hemos contado con tres años muy buenos: el campo ha sido muy bueno estos años atrás, y eso nos ha ayudado muchísimo, pero como se han puesto los costes ahora mismo, todo sigue subiendo y llega un momento en el que todo se pone inviable. Si un kilo de pienso valía 40 pesetas y ahora más de 80, sube un 100%. Si tienes buen campo, y viene un año que llueve, eso es fundamental».
Pero a todos los problemas que hay ahora se suma el de la lengua azul, como si no fuera bastante, con la subida de los costes derivado de la guerra en Ucrania: «Si te salta un foco cerca, imagínate; España ha estado libre de lengua azul, pero cuando menos te lo esperas salta. El toro no es toro solo, sino lo que acarrea; el toro es el que paga el gasto de la ganadería, si salta un foco y nos vemos afectados la situación se puede llegar a poner muy negra».