DESPEDIDA

El silencioso (y honroso) adiós de Agustín Navarro, el picador que ha ‘incumplido’ su promesa a Ginés Marín: «Uno debe retirarse cuando es feliz»


martes 15 noviembre, 2022

El picador Agustín Navarro, que ha ido acompañando a Ginés Marín en las ocho últimas temporadas, se ha despedido en silencio de los ruedos a pesar de un brindis de Ginés Marín en Zaragoza en el que le instó a seguir una temporada más si desorejaba a aquel toro... y lo hizo.

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Ginés Marín brindando a Agustín Navarro. © Estefanía Azul

Se va en silencio. Como los grandes. Agustín Navarro, picador oriundo de Vilches (Jaén), ha dicho adiós a los ruedos en medio del sigilo que deja el invierno jiennense. Entre olivos, en tierra de toreros a caballo con chaquetilla de oro, despidiéndose -como buen hombre de cuadrillas- dándole protagonismo a su matador, Ginés Marín. Y eso le hace grande.

En la pasada Feria del Pilar, Ginés Marín le brindó un toro a Agustín y le hizo una apuesta: si le cortaba las orejas, le instó a acompañarle una temporada más en sus filas. Agustín aceptó. Y Ginés se las cortó. Pero luego declinó, honrando así la decisión que ya antes de aquella tarde en La Misericordia él mismo había tomado, y también honrando a la profesión, ya que esta temporada ha cumplido orgullosamente los 55 años de la jubilación de un picador de toros.

«Yo tenía clara esta decisión desde el principio, pero no quería anunciarlo hasta que pasase la boda de Ginés», señala a este medio Agustín Navarro. El enlace, acaecido a finales del pasado mes de octubre, fue la fecha marcada por el propio picador para hacer pública su marcha.

«Ginés Marín no quería que me fuese; cuando me brinda el toro en Zaragoza, al final del brindis me dice que si le cortaba dos orejas al toro, seguía un año más conmigo. Y llegó y le cortó las dos orejas. No hubo dudas por mi parte, pero yo decidí que hasta que no se casara el 29 de octubre, no lo decía«, añade.

La trayectoria de Agustín Navarro, en los últimos ocho años al lado de Ginés Marín

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Agustín Navarro. © Estefanía Azul

«Empecé con El Andujano en Cenicientos, luego entré con Rafaelillo, toda la carrera de Dávila Miura, con Manuel Díaz “El Cordobés», Daniel Luque, El Juli, Curro Díaz y me he retirado con Ginés Marín, con quien he estado ocho temporadas -desde su debut con caballos-«, explica Agustín Navarro a este medio. «Una vida entera dedicada al toro, y estoy súper agradecido a él, a los compañeros y a la afición. He conseguido cosas que no pensaba”, añade.

«He incumplido una promesa, pero uno debe saber cuál es su momento, y retirarse cuando uno es feliz dentro de la plaza. Porque si sigues un año más y no salen las cosas, no te vas con la misma alegría y la misma satisfacción. Por eso, de forma meditada, decidí que era mi momento, porque era súper feliz delante y fuera de la cara del toro», concluye.