El Retamar es una ganadería de encaste Núñez que pasta entre Becerril de la Sierra y Manzanares el Real, en plena Sierra de Madrid. Paco Plazas, mayoral de la divisa, es un hombre que sabe de la dureza de la vida, un hombre curtido en la cultura del esfuerzo, el cual compagina sus labores en el campo con la de picador. Con el mismo temple que maneja a los animales en el campo lo hace a la hora de picar a los toros en la plaza de toros. Curtido en mil batallas lucha por seguir conservando un encaste único, por seguir dándole notoriedad a una ganadería en alza.
Hoy hablamos con un hombre de conversación afable, conocedor perfectamente de las virtudes y los de este mundo tan bonito como es el del toro. Nos descuelga el teléfono para hablar de lo que más le gusta, el toro bravo. Nos confiesa que podría estar hablando durante horas de las reatas, el tipo de embestida, las hechuras de los Núñez que tanto mima. Una divisa que lucha día a día por seguir escribiendo su historia.
El Retamar, una ganadería con 160 madres y 9 sementales
P- El Retamar es una ganadería singular, con un tipo de toro bien definido, a la cual estás estrechamente ligado. Háblanos un poco sobre ella.
R- Llevo desde 1994 al cargo de la ganadería como mayoral, en la cual tenemos encaste Núñez, línea Rincón. En los últimos años se refrescó comprando sementales de Gabriel Rojas para seguir perpetuando este encaste que tanto nos gusta y que tanto nos ha dado. El toro de casa es un animal de buenas hechuras, bajito, con mucha viveza en su mirada, el cual suele tener un comportamiento noble en la plaza.
P- Una ganadería como nos dijiste con un sello muy marcado en la que el origen Núñez es innegociable, pero ¿cómo está compuesto El Retamar?
R- Tenemos aproximadamente unas 160 madres y 9 sementales, creemos que es un número ideal para nuestra idea de ganadería. Con este volumen de ganado sacamos anualmente unas cuatro novilladas. Este año tenemos también dos corridas de toros, esto se debe a que se quedaron en los cercados de casa dos novilladas. También creemos que es fundamental lidiar en festejos menores, por lo que también tenemos para este año tres novilladas sin picadores a disposición de cualquier empresa.
P- Paseando por los cercados vemos que los animales están muy rematados pese a las fechas en las que estamos.
R- Nosotros tenemos la ganadería muy en la mano, por eso procuramos tener los animales bien rematados para que cuando vengan las empresas los vean perfectamente. Date cuenta que los toros ya estaban muy preparados de utreros, por lo que este año en la fecha que estamos podrían lidiarse perfectamente.
P- 2021 supongo que fue un año difícil para El Retamar, una temporada en la que la incertidumbre estuvo presente hasta mediados de temporada. ¿Cómo escapasteis?
R- El pasado año lidiamos tres novilladas con unos resultados más que satisfactorios para nosotros. Una en Valdetorres del Jarama en el circuito de novilladas de la CAM, otra en Villarubia de Santiago y la última en Recas, un pueblo de Toledo. Para nosotros la más completa fue esta última, prácticamente los seis novillos embistieron. Respecto a las sin caballos te diré que lidiamos en una en Albacete y una ultima en Colmenar Viejo.
P- Y por último, sabemos que compaginas tu labor de mayoral en El Retamar con la de picador de Sergio Serrano.
Yo le estoy muy agradecido a Sergio Serrano por seguir confiando en mí para ir en su cuadrilla, creo que es un torero que aún tiene mucho que decir, el cual a buen seguro dará que hablar en esta temporada que se nos viene encima. La temporada pasada fue bastante buena, y los resultados de Sergio están ahí, son indiscutibles. La oreja de Madrid nos valió mucho para seguir tocando puertas, su tarde de Albacete no le fue a la zaga, yo creo que estamos ante un torero que si los toros le respetan se haga con un sitio importante en el escalafón. 2022 seguro que será su año.
