El toro es un atleta animal, por ello su preparación de cara a su lidia en la plaza de tiene que ser exhaustiva. Su entrenamiento se hace de forma paulatina, para que vaya ganando en fondo. Sin una preparación física acorde, el toro bravo llegaría muy mermado de facultades a su lidia en la plaza, de ahí que los ganaderos tengan esta faena como una de las más importantes a realizar en el día a día-
Sanidad, alimentación y manejo son tres patas en las que debe sustentarse un toro bravo. Si falta una de ellas toda la bravura que llevan dentro no se desarrollará de forma optima. Hemos visto cómo hay ganaderías, según su orografía, que mueven a los toros de una forma u otra. También hay ganaderos que no quieren apretarle al toro demasiado: cada casa es un mundo.
El toro es un animal sedentario, que no se movería si no se le obligara a ello. Por ese motivo los ganaderos se las ingenian para que hagan el mayor ejercicio posible. Uno de ellos es colocarles la comida y la bebida en zonas opuestas del cercado., pero ejercitarlo no es simplemente con el objetivo de que cumplan en el ejercicio físico, sino también para evitar peleas. Cuando se unen en una misma cerca dos grupos diferentes, la tendencias es medirse por el poder, sin embargo si en ese momento se les mete en el corredero y se les obliga a hacer ejercicio cuando lleguen al cercado las fuerzas estarán muy justas, evitando así las peleas.
Hay muchos tipos de correderos -cada ganadero lo hace como cree oportuno -pero hay uno muy curioso en la ganadería sevillana de las Monjas, ubicada en el término municipal de Lora del Río. Los toros tienen que cruzar el lago para llegar a la otra parte del cercado, esto les alivia del calor y de los insectos, además de ayudarles en su ejercicio físico. Los toros saben nadar, algo que no toro el mundo conoce, por lo que para esta labor es fundamental el trabajo de los cabestros: los toros confían en ellos y les siguen sin problema. Así se ve en el siguiente vídeo del programa Toros para Todos, de Canal Sur.
Los toros ya están acostumbrados en esta casa a pasar por el lago; normalmente al principio lo extrañan, pero una vez que pasan el agua hacia la otra parte del corredero no volverán a desconfiar. El agua en verano alivia el calor, y eso los animales lo saben, de ahí que acudan a beber e incluso a bañarse cuando las temperaturas son altas. En Las Monjas llevan mucho tiempo haciéndolo así y el resultado fue espectacular. Los toros ganan en fondo físico, algo esencial para su lidia en la plaza.
También es cierto que hay ganaderos que no comparten el acto de correr los toros: no les gusta porque los astados se pueden aspear, lesionar, o incluso morir por algún problema derivado del ejercicio. Estos ganaderos son más de pasearlos a su aire, no apretarles, que el animal vaya cogiendo fondo más poco a poco, sin expresarlo en demasía. Sin duda son diferentes opiniones según la visión del ganadero.