Siempre hablamos del desconocimiento que tiene parte de la sociedad sobre el toro bravo en el campo. Este tipo de animales está continuamente midiendo sus fuerzas, buscando destronar al líder o en su caso proteger aquello que se ganó en su día. Como ya dijimos en alguna ocasión, el campo bravo es un continuo aprendizaje para todos aquellos que conviven con este mítico animal, un lugar donde es vital conocer sus reacciones para no llevarse un susto.
Pese a su nobleza a campo abierto, los animales bravos son astados muy jerárquicos, no aceptando fácilmente las órdenes, por todo ello, en multitud de ocasiones se arrancan sin previo aviso cuando hay que cambiarlos de cercado, llevarlos al corredero o embarcarlos. Pero en esta ocasión, el vídeo publicado en TikTok nos muestra cómo un animal avisa al cámara, demostrando que no está cómodo con su presencia.
Pero no todos los toros son iguales: hay unos más ariscos que otros, y hay que tener cuidado con ellos por el comportamiento imprevisible que pueden llegar a tener. En esta ocasión el imponente salinero se echa arena a los lomos y mueve ostensiblemente la cabeza; está avisando y, cuando el toro se muestra de esa manera, todo puede pasar. El animal bravo normalmente avisa antes de tomar una decisión, y este astado llevaba ya un rato haciéndolo, de ahí que el ganadero tomase distancia con él, la suficiente para que se respetasen entre los dos.
En esta ocasión no se trataba del manejo de un toro en el cercado, sino de la grabación de un vídeo que pudo costarle caro al que andaba filmando. Se había metido en su territorio, y eso el toro no lo iba a consentir, de ahí que hiciera esos gestos de aviso. Un momento de gran tensión que de no ser por la nobleza del toro podía haber acabado de mala manera. El respeto al toro siempre debe estar presente, nunca hay que dar un paso más de lo que te deja el animal.
Diferente es cuando es una faena de campo y el animal intenta desafiar al caballista; ese es un tipo de comportamiento que no se puede tolerar, todo lo que sea no corregirle manías o desaires puede ser contraproducente. El toro tiene que saber quién manda, ese al que le tiene que tener respeto, de lo contrario se haría el amo y señor del lugar, imposibilitando cualquier labor que le obligue hacer algo que no quiere. En el campo todo hay que hacerlo, son aspavientos, más por el camino de la templanza y las nuevas maneras que por la fuerza, ya que por esta vía siempre gana el animal.
Por suerte el toro no estaba solo, se encontraba con sus hermanos de camada, algo que ayudaba a calmarlo y a que no estuviera en tensión. Un comportamiento que ni mucho menos dista del que suele tener cuando anda pegado o apartado del resto de sus hermanos. Ahí si es tremendamente peligroso.
Un toro de Hermanos Cambronell que se encontraba en la finca «El Trapío»
El toro pertenece a la ganadería salmantina de Hermanos Cambronell, pero estaba descansando en la finca «El Trapío», ubicada en las cercanías de la localidad valenciana de Moncada -que lo adquirió el pasado año para luego ser vendido para su lidia en las calles-. Finalmente, el animal dio juego en el municipio madrileño de Velilla de San Antonio, haciendo disfrutar a cientos de corredores.
@lu_yaicr03 Buenas perchas. #toros #campo #torosbravos #encierro #sialostoros🇪🇦 #tauromaquia #bousalcarrer #parati #capcut ♬ The Crown Main Title – Hans Zimmer