El diestro Juan José Padilla ha enviado un comunicado en la mañana de este jueves a la redacción de Cultoro en el que se defiende de las acusaciones de su ex poderdante, el torero pacense Manuel Perera, y acaba deseándole «la mejor de las suertes». Las palabras del joven torero fueron publicadas el pasado martes en una entrevista en el diario El Mundo.
El comunicado íntegro de Juan José Padilla
Ante las desafortunadas declaraciones que Manuel Perera ha realizado al diario “El Mundo” con fecha de 7 de marzo de 2023 en las que vierte graves acusaciones contra mí, debo aclarar algunas cosas:
Quiero dejar constancia de mi profundo pesar por toda esta situación y supongo que algo grave le afecta a Manuel para llegar a afirmar cosas que los documentos, la gente que nos ha rodeado a lo largo de nuestra relación y los propios hechos desmienten. Mi forma de ser me impide sentir rencor u odio, pero esta situación me entristece mucho.
Es especialmente doloroso que diga que le he “vaciado la cuenta”. Al margen de lo irresponsable que es afirmar eso en un periódico, desde el punto de vista penal, quiero decir con rotundidad que es simplemente falso. Los extractos bancarios y las liquidaciones de cada una de las actuaciones lo desmienten. Quiero también dejar constancia de no haber percibido nunca ninguna comisión por mi trabajo. Tras veintinueve años de matador de toros, una gestión razonable del fruto de mi esfuerzo y unos valores que llevo grabados a fuego en el alma, puedo afirmar con toda humildad que, ni por esa cantidad ni por ninguna otra, por más ceros que tenga, echaría a perder el privilegio de poder mirar a la cara a todo el mundo con la limpieza y el respeto que no se han tenido conmigo.
Respecto a la presión ejercida sobre él y los posibles malos tratos o actuaciones de carácter ofensivo que me imputa, creo que se equivoca; aunque, aquí, todo es opinable. Me explico. Es él quien acude a mí para hacerle superar los enormes retos que plantea esta profesión. Jamás le exigí algo que no me haya exigido a mí mismo. Es más, he sido mucho más indulgente con él de lo que lo he sido conmigo. Lo que afirmo ha dejado huellas en todo mi cuerpo que hablan, por sí mismas, del camino que espera a cualquiera que elija la carrera de torero. Me he podido equivocar en muchas cosas, pero no he tenido otro horizonte que el de hacerle llegar a la cumbre de una profesión extremadamente dura, pero también, la más bonita del mundo.
Siempre he sabido ver el enorme talento que tiene Manuel, así como su gran problema. He tratado de potenciar sus virtudes y limar los defectos. He puesto mi casa, mis recursos y los de todos aquellos que sienten respeto por mí a su disposición para ello, incluida la ayuda médica necesaria. Parece que no ha sido suficiente.
Lamento profundamente todas las declaraciones de Manuel y siento en el alma tener que salir al paso de ellas, pero no puedo permitir, bajo ningún concepto, que mi nombre se vea empañado ni como torero ni como persona. Conozco bien el peso de la responsabilidad -siempre personal, no ajena-, el dolor y el sufrimiento que llevan aparejados esta profesión. Quiero pensar que todo este sinsentido es fruto de ello. No puedo dejar de sentir afecto hacia este torero, un afecto que también le expresó mi familia en los largos períodos en los que convivió en nuestra casa. Todos nosotros le deseamos la mejor de las suertes. Espero que le vaya muy bien y que pueda recapacitar y enderezar su camino.
Sanlúcar, 9 marzo de 2023.