Muchos han sido los matadores aficionados que han usado las redes sociales para valorar la actuación de Rafael de Julia el pasado domingo en Las Ventas. El torero madrileño salía de la plaza con el rostro desencajado y la mirada perdida, consciente de que su tarde con la corrida de Adolfo Martín había sido un lunar negro en su carrera. La primera oportunidad que tenía este año en la primera plaza del mundo se había esfumado, y lo que es más duro, había decepcionado a una afición que lo esperaba tras su gran tarde del pasado verano con un astado murubeño de Castillejo de Huebra.
Pudimos leer todo tipo de comentarios en las redes sociales, desde mensajes de apoyo y comprensión, pasando por otros duros pero constructivos, e incluso algunos con faltas de respeto hacia un torero que trenzó el paseíllo con el objetivo de volver a encandilar a su plaza. La crítica es necesaria, sin ella se caería en la complacencia y eso es algo que va en contra de los principios de aquellos que se sientan en la piedra de un tendido para analizar aquello que allí pase.
El madrileño es el primero que es conocedor de los motivos por los que la tarde se dio de esa forma, teniendo este un paseíllo en la Goyesca del 2 de mayo para tornar las lanzas en cañas. Precisamente sobre este tema quiso hablar Miguel Abellán en sus redes sociales. El torero y antiguo Director de Asuntos Taurinos de la CAM quiso mandar un mensaje de apoyo hacia un espada al que le ha llevado muchos años tener una oportunidad como esta en la primera plaza del mundo.
Su compañero y amigo quiso echarle un capote y salir en su defensa con un claro mensaje en X (antes Twitter): Escucho y leo la tarde de Rafael de Julia ayer en las Ventas. Sin duda algo pasó que se nos escapa a todos salvo a él, pero si me gustaría que se le respetara porque es un TORERO CON MAYÚSCULAS. Puede que cuando sepamos la verdad alguno se arrepienta de ser tan cruel con él.
Escucho y leo la tarde de Rafael de Julia ayer en las Ventas. Sin duda algo pasó que se nos escapa a todos salvo a él pero si me gustaría que se le respetara por que es un TORERO CON MAYÚSCULAS. Puede que cuando sepamos la verdad alguno se arrepienta de ser tan cruel con el. pic.twitter.com/qkdieS5PJG
— Miguel Abellán (@miguelabellan) March 24, 2025
Rafael de Julia: del clamor a la decepción en poco más de seis meses

De una tarde de toros a otra todo puede cambiar, aquellas alabanzas y mensajes de felicitación cuando cuajas a un toro en una plaza de importancia se esfuman como el humo de un cigarrillo cuando las cosas no se ven claras y la tarde te sobrepasa. Algo así le ha pasado a un Rafael de Julia al que todos le cantaron su gran concepto y lo importante de contar en los carteles con un torero de su clase tras su gran faena en Madrid el pasado 15 de septiembre. Esos mismos que ahora le señalan con el dedo y poco más que le enseñan la puerta de salida tras una tarde donde el “petardo” fue incuestionable.
En el toreo siempre han existido tardes buenas y otras donde las cosas salieron rematadamente mal, existiendo incluso espadas que se dejaron vivo un toro en el ruedo. Como ya dejábamos caer en la primera parte del texto la crítica debe existir, es más, sin ella todo carecería de sentido, pero una cosa es valorar en su justa medida aquello que ocurrió y otra cosa es ser excesivamente severo e intransigente con un espada que únicamente sumó cuatro paseíllos la campaña pasada.
Entre el 15 de septiembre y el 23 de marzo han pasado muchas cosas por la cabeza de un torero que se ha puesto delante de animales de Concha y Sierra, Castillejo de Huebra y Adolfo Martín. Con el primero de ellos exhibió su gran clase con el medio muletazo que tenía el animal. Sería al cuarto al que le realizaría una faena marcada por la clase y la inteligencia delante de un astado al que de no pinchar le hubiera podido cortar el doble trofeo. Dos faenas que le pusieron en el foco, ese que pareció apagarse tras verse a totalmente a merced de un cuarto de Adolfo que lo dejó prácticamente en la lona.
