Con el paso de los años, la afición taurina está experimentando cómo están surgiendo nuevos festejos con un cariz distinto al que se lleva a cabo en gran parte de la temporada. Este cambio no ha venido derivado tanto en la esencia del espectáculo en el ruedo y sí por su forma de presentarlo, es decir, por el envoltorio que rodea a la corrida.
El traje de luces se trata de una vestimenta tradicional que procede del traje de los majos de finales del siglo XVIII y que acabó convirtiéndose en una ropa exclusiva para ejercer el ritual taurino. Con posterioridad le fueron añadidos diversos adornos, como la montera, los bordados y los alamares. Después de los cambios introducidos por “Paquiro”, el traje de luces actual difiere más bien poco del utilizado en el siglo XIX. Los han ido evolucionando en una línea más cómoda y sencilla.
Ese envoltorio del que hablábamos antes puede ir representado por el cambio a la hora de enfocar una corrida. Con la irrupción de las corridas goyescas el traje dejó de ser de luces para ceñirse a la propia vestimenta de la época de Goya (XVIII-XIX). Un tipo de festejo excepcional que se daba en determinadas corridas al año, siendo la más famosa la celebrada anualmente en Ronda durante su feria de Pedro Romero.
Con el paso se los años han ido surgiendo todo tipo de corridas alegóricas a distintas fechas; Pinzoniana en Palos de la Frontera, Magallánica en Sanlúcar de Barrameda, Lepantina en Villarejo de Salvanes, una con tintes de la época de Felipe V en Cazalla de la Sierra o la anunciada el próximo 3 de diciembre en la plaza de toros de Jurquilla (México), que ha sido denominada como “D’Artagnan y los tres mosqueteros”, entendiendo que sus vestimentas irán basadas en dicha época.
🦋 Juriquilla
✈️ Comienza temporada mexicana!! 🇲🇽
3️⃣ de Diciembre. pic.twitter.com/1sHtpfcV1m— Antonio Ferrera (@ferrera_torero) November 10, 2022
Un festejo que ha levantado polémica entre los aficionados al igual que lo hacen las corridas que se salen de la liturgia común de la tauromaquia. Las redes se han llenado de mensajes de todo tipo, existiendo una mayoría que ve exagerado este tipo de corridas donde se desvirtúa en cierto modo el festejo al buscarse un tipo de atuendo distinto al que se suele usar en las plazas de toros. Otros aficionados ven a bien este tipo de cambios, dándoles tintes diferentes y un cariz novedosos a los mismos.
Una corrida que anuncia a Antonio Ferrera con tres de los toreros más demandados por la afición mexicana. Así la empresa gestora del coso ha tenido a bien anunciar juntos a Leo Valadez, Diego San Román e Isaac Fonseca ante toros de Pepe Garfias. Una corrida especial que dará comienzo a las cinco en punto de la tarde. Sin duda una polémica que no debe enturbiar el excelente cartel que se ha dispuesto para celebrar el 35 aniversario de la preciosa y coqueta plaza de toros de Juriquilla.
La tarde de la ansiada inauguración fue el sábado 6 de junio de 1987 con un mano a mano entre Curro Rivera y Miguel Espinosa “Armillita Chico”, los toros fueron de don Javier Garfias. El primer astado se llamó “Siempre Vivo” y le cupo en suerte a Curro Rivera, el cual le cortó una oreja tras una faena de gran temple. Desde 1987 hasta ahora han sido muchísimos los toreros que han pasado por esta plaza y que han triunfado en su coqueto ruedo.