Ya contamos recientemente en este medio las distintas vacadas que han nacido a este lado del charco en los últimos meses, proyectos ganaderos en ciernes que con el tiempo podrán convertirse en una realidad. Vacadas jóvenes y, en algunos casos desconocidas, que probaron suerte en este mundo del toro al adquirir ganado de procedencias tan conocidas como Torrestrella, Marqués de Domecq, Victoriano del Río, Alcurrucén o Santiago Domecq, entre otras.
Proyectos basados en líneas y reatas de gran importancia pero con un número no muy alto de ejemplares. Algunos de ellos todavía no están dados de alta en ninguna asociación, algo que no le permite lidiar en ningún festejo de forma oficial. Uno de ellos es el que empieza a fraguarse en la finca que en su día dio cobijo a las vacadas de Caras Blancas del Carpio y Bellalucía, dos hierros que cuida con mimo -en otra finca- el recortador, banderillero, empresario y ganadero D. Julián Gómez Carpio.
Con la salida de estos ejemplares de la finca situada en Fuentidueña de Tajo, fue el futbolista hispano-dominicano Raúl de Tomás quien fue poco a poco adquiriendo ganado y llevándoselo a los distintos cercados de esta pequeña, pero bien estructurada, finca a orillas del Tajo. Tras darle un lavado de cara a la explotación se empezaron a torear toros y novillos a puerta cerrada por parte algunos matadores de toros y novilleros.
Pero Raúl no es el único futbolista que tiene metido dentro el veneno de la tauromaquia, otros como Sergio Ramos, Joaquín Sánchez, Iker Muniain, Chimy Ávila, Koke o Nacho Fernández defienden a capa y espada un mundo que les apasiona, en incluso este último se asoció el 50% con su buen amigo Alejandro Talavante, teniendo del defensa madridista un pequeño hato de vacas de línea Osborne en la finca que posee muy cerca de Madrid.
Fruto del apoderamiento de Alejandro Chicharro, el equipo de apoderados del madrileño optó por la adquisición de un número de machos para la preparación de los compromisos más importantes de la temporada. Pero con la llegada del otoño el delantero centro del Rayo Vallecano fue un punto más allá al comprar 30 eralas sin tentar de Victoriano del Río, ejemplares que una vez pasado el fielato de la tienta se quedarían pastando en la propia finca.
Se trata de un número de animales que no da para comenzar una ganadería, pero sí para ejercer de base para un proyecto que le ronda por la cabeza al propio Raúl de Tomás. Todavía es pronto, una ganadería, por pequeña que sea, siempre quita mucho tiempo, ese del que no dispone actualmente un futbolista de élite como este. El tiempo dirá si poco a poco llegan más animales a esta finca o, por el contrario, este proyecto queda guardado en un cajón.