DECLARACIONES

Roca Rey rompe su silencio tras lo sucedido en Madrid: «Podría haber sido peor»


jueves 22 junio, 2023

El peruano habló en Espacio Toro tras sus tres tardes en Las Ventas entre mayo y junio: "Nunca había visto la plaza de toros de Las Ventas así, tan entregada y tan apasionada".

Roca Rey
Roca Rey el 11 de junio en Las Ventas. © Plaza 1

El diestro Andrés Roca Rey rompió hace unos días su silencio tras sus tres tardes en Madrid -dos durante la pasada Feria de San Isidro y una en la corrida “In Memoriam”, celebrada en Las Ventas el 11 de junio- y habló en el programa de RNE Espacio Toro, dirigido por el periodista David Casas y que cuenta con la colaboración del aficionado Domingo Delgado de la Cámara.

Tras lo sucedido en la tarde del día 11, en la que el propio Roca Rey incluso se enfrentó al tendido 7 debido a los constantes gritos que le lanzaron durante la lidia de sus dos toros, señaló lo siguiente también en relación a cómo fue prendido en esta corrida: «Estoy con un poco de dolor, pero gracias a Dios nada fuerte. Podría haber sido peor. Estoy agradecido y contento. Se descartan las fracturas de costillas. No tengo nada. Solamente dolor cuando se tose o se quiere respirar fuerte. Sobre todo molesta».

Roca Rey venía mermado por una rotura fibrilar y una cornada interna en Toledo

Roca Rey
Roca Rey tras la cogida. © Luis Sánchez Olmedo

Además, Andrés Roca Rey venía mermado por una rotura fibrilar y una cornada interna en Toledo: «Una de las dos volteretas fue muy fuerte. Tengo el músculo de la pierna derecha roto y detrás de la izquierda una cornada interna, pero con la fisioterapia y con el tiempo, todo se va pasando». Sobre el resultado de la tarde en Madrid, señala que está «muy orgulloso y contento interiormente, además de como torero de poder seguir creciendo y poder emocionarme en la primera plaza del mundo».

«Fue un San Isidro difícil, con muchas cosas en contra y era la tarde que me quedaba»

E iba más allá en sus palabras: «Tenía mucha responsabilidad encima, si no te mentiría. Fue un San Isidro difícil, con muchas cosas en contra y era la tarde que me quedaba, no en San Isidro pero sí en Madrid. Era la última y tenía la necesidad como persona internamente de que pasara algo importante y me intenté entregar por gusto interno.

Sobre cómo vive esa exigencia, Roca Rey confesó lo siguiente: «Sabemos que Madrid es la plaza más importante, que por eso mismo los triunfos son tan especiales y tan rotundos. No es nada nuevo que la gente te quiera exigir».

«Nunca había visto la plaza de toros de Las Ventas así, tan entregada y tan apasionada»

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Roca Rey, saliendo de una tanda y mirando al tendido.

«Sinceramente, nunca había visto la plaza de toros de Las Ventas así, tan entregada y tan apasionada. Siento que estaban sintiendo lo que yo estaba viviendo delante del toro, por más metros de distancia que tuviera yo con el público. Parecía que estaban leyendo mi mente y escuchando mi corazón. Siento que pude transmitirles. Quiero seguir evolucionando cada tarde, sacando cosas buenas de mí y crecer como artista y como persona», ponía en valor el peruano.

Y describía así sus dos astados en aquel 11 de junio: «El primer toro no me pareció nada bueno ni nada fácil. Lo que tuvo es que, de un momento a otro, parecía como si esas cosas tan feas que había hecho por el lado derecho, dejó de hacerlo tantas veces. Y realmente fue un momento muy especial, porque sentí que realmente había estado entregado, le había tragado esas miradas que tenía y parecía que en esos momentos los toros te pierden, por más malos que sean. El sexto, realmente no lo recuerdo muy bien; siento que estaba ya muy metido e la corrida, estaba viviéndolo de una forma muy especial, sin pensar tanto con la cabeza, sino con el corazón. Fue una faena que en cierta forma disfruté y lo pasé bien en Madrid».

Roca Rey: «Hay que hacer un esfuerzo todos los días»

Concluía su paso por Espacio Toro de esta forma Roca Rey: «Hay que hacer un esfuerzo todos los días. Tarde a tarde, debes defender un sitio, quieres seguir creando tu historia en el toreo y es lo que verdaderamente te lleva a mantener la ilusión para, día a día, no fallarle ni al torero que eres, ni a ti como persona ni al público que llena las plazas para verte».