Ocurrió el pasado fin de semana en la plaza de toros de Valladolid: el matador de toros Andrés Roca Rey brindaba uno de sus astados a Victoria Federica, nieta de D. Juan Carlos I, sobrina de Felipe IV e hija de la Infanta Elena. Una gran aficionada al mundo del toro y declarada admiradora de Andrés Roca Rey, torero al que sigue en numerosos cosos.
Una tarde que nuestro compañero Pablo González titulaba de la siguiente forma: «La esencia y lo arrollador, unidos en hombros: Urdiales destapa el tarro y Roca Rey pone orden» y en la que el torero peruano cortaría un total de tres orejas a su lote de Victoriano Del Río. Un brindis especial entre dos amigos en una tarde en la que Victoria cumplía 22 años, «Feliz cumpleaños, querida Victoria» escribía en redes sociales Andrés.
Roca Rey ponía orden tras el escándalo de la doble devolución de dos toros y le cortaba las dos orejas al tercero tris en una faena en la que selló hondos naturales, faena de hondura, ligazón que caló enormemente en los tendidos, esos que disfrutaron de una faena que acabó en las cercanías del animal madrileño.
No es la primera vez que Andrés le brinda un toro a Victoria Federica, una aficionada que fue a Valladolid a disfrutar del toreo de una terna por la que siente admiración y a la cual ya vio en directo en alguna que otra ocasión en plazas como La Real Maestranza de Caballería de Sevilla o la Monumental de Las Ventas de Madrid.
Su afición le viene tanto por sus padres como por su abuelo materno, ambos le han inculcado el amor por la fiesta de los toros, ese que también comparte con su hermano Froilán. Como grandes aficionados a los toros que son todos, el sábado no quisieron perderse una de las corridas en la Plaza Real del Puerto de Santa María. Allí toreó Roca Rey. Gran amigo de Victoria y su grupo.