En tierras cercanas a Jerez de la Frontera, y junto a la localidad de San José del Valle, se encuentra la finca Garcisobaco, un precioso paraje donde el toro bravo de Santiago Domecq es el rey. Junto al caballo, son las auténticas pasiones de una familia que vive por y para el toro bravo y que apuesta por un tipo de animal muy particular, ese que tiene varias sangres dentro de un mismo tronco que le dota de una personalidad especial.
Este es un hierro que en su día perteneció a la familia Núñez y que ahora lucen con orgullo los toros de esta afamada vacada. Una ganadería que tiene varias procedencias dentro del encaste Domecq, esas que no otras que Torrestrella, Juan Pedro Domecq y Toros de El Torero. Una ganadería con grandes particularidades, ya que pese a tener un gran porcentaje de sangre Domecq el toque de Núñez es el que le da una personalidad más acuciante a la ganadería.
Son momentos duros por la baja Andalucía, ya no solo por las consecuencias derivadas de la pandemia, sino por la subida de las materias primas y por un clima que no está ayudando nada a los ganaderos. La falta de lluvias está haciendo que el campo se esté secando con gran rapidez, con temperaturas por encima de los 25 grados, el verano va a ser más largo de lo que se esperaba como no entren varias borrascas que vuelvan a darle algo de vida al campo.
Un ilusionante 2023 para Santiago Domecq
Un 2023 que se presenta ilusionante para una ganadería que año tras año va subiendo escalones. Pese a las decepciones lógicas, han seguido apostando por ese toro que tienen en la cabeza. Ni los triunfos les hacen venirse arriba, ni los fracasos provocan que reine el pesimismo. «De momento tenemos cerradas plazas como Sevilla y Madrid, dos cosos de primer orden a las que volvemos este año. Son dos plazas que nos ilusionan enormemente, pero que nos cargan de una gran responsabilidad», indica Santiago Domecq hijo a este medio.
El tercer paseíllo de la temporada se dará en Jerez de la Frontera, tierra natal de los ganaderos y lugar donde se encuentra la ganadería. Será en una corrida concurso, esa que tantos buenos recuerdos le trae a un hierro que se alzó con el premio en la última edición. «Jerez es nuestra casa, estar presente en la recuperación de un festejo de cal magnitud en la ciudad es un orgullo«, expone el criador jerezano.
Será un festejo donde comparten tarde con otros cinco hierros de gran vitola como Fermín Bohórquez, Juan Pedro Domecq, Carlos Núñez, Toros de El Torero y Álvaro Núñez Benjumea, una tarde donde trenzarán el paseíllo los sevillanos José Antonio Morante de la Puebla y Pablo Aguado, así como el francés Sebastián Castella.
Una camada ya rematada
La camada ya está rematada, sus ganaderos son conscientes que la preparación es básica, de ahí que no dejen nada al azar. Selección, alimentación, sanidad y manejo son las cuatro patas del banco, la una sin la otra, no llevarían a buen puerto a un proyecto comandado por Santiago Domecq Bohórquez y amparado por Jaime, Santiago, Carlos y Ana Domecq, sin duda el futuro de un proyecto ganadero con un gran futuro.
A Garcisobaco se fue nuestro compañero José Joaquín Diago para fotografiar la camada de este prestigioso hierro que aún no oficializó esos compromisos que tiene durante este 2023, pese a que ya muchos de ellos los tienen cerrados. Como bien nos cuenta Santi Domecq serán cinco las corridas las que se lidien esta temporada más algún toro suelto. «Estaremos presentes en plazas de relevancia tras los triunfos de los últimos años”» A las ya consabidas de Sevilla, Madrid y Jerez, se suman otras dos plazas que tienen muy ilusionados a los ganaderos.
«En agosto iremos a plazas como Béziers y Antequera, dos cosos donde ya hemos lidiado años atrás. Luego nos queda una corrida muy bonita de plaza de segunda aun sin destino, la cual esperaremos colocar en breve. Creemos que es una camada muy equilibrada con tres corridas de plaza de primera, una de segunda y otra de tercera«, nos comentaba el joven ganadero jerezano.
Por lo tanto, serán Sevilla, Madrid, Beziers, Antequera, Jerez de la Frontera —con un toro— y una plaza de segunda aún por definir, serán los destinos donde la divisa azul y blanca esté presente en esta temporada en la que cumple 40 años de existencia tras ser adquirida en 1983 a los hermanos Núñez.
FOTOGALERÍA: José Joaquín Diago