Vivía Zaragoza una tarde de auténtico boato por el cartel que se anunciaba en La Misericordia. Con el ‘No hay localidades’ colgado en las taquillas de la plaza, Morante de la Puebla, Diego Urdiales y Alejandro Talavante tenían la oportunidad de regalarle una tarde de gran toreo a una afición que respondió ante la llamada de las figuras. Una corrida de Juan Pedro Domecq esperaba en los chiqueros para una terna de campanillas.
Morante abrevia con el «esaborío» primero
Arrancó la tarde más esperada de esta feria del Pilar 2022, con lleno de no hay billetes y grandísimo ambiente, y lo hizo con la salida al ruedo de la Misericordia de «Vidriero», un colorado de 512 kilos de peso, cinqueño, de buena presencia y musculado, aunque sin exageraciones. Y con el nos deleitó de salida Morante de la Puebla con un ramillete de garbosas verónicas. Empujó con fijeza el de Juan Pedro Domecq en el primer encuentro con el picador, repuchándose en el segundo. Cerrado en tablas comenzó el de la Puebla su faena y en el segundo muletazo el toro dió una vuelta de campana por humillador. Sacó nobleza el toro por el lado derecho y Morante lo templó en la primera tanda. Por el izquierdo el toro se lo pensaba más, quedándose corto. Abrevió el matador sin darse coba, con un toro que empezó a escarbar y a repucharse. Dejó una estocada arriba tras dos pinchazos , y acertó a la primera con el verduguillo. Pitos para el toro de Juan Pedro Domecq y silencio para Morante de la Puebla.
Diego Urdiales tampoco se expone con el inválido segundo
El segundo de la tarde fue «Velludo» un toro negro mulato muy en tipo de la casa, bajo y de buena hechura, que correspondió al torero riojano Diego Urdiales. Dejó una buena tarjeta de presentación Diego Urdiales a la verónica, rematada con una gran media, a un toro que blandeó después. Derribó con poder el de Juan Pedro a Manuel Jesús Ruiz en la primera entrada, al relance y cayó el toro tras chocar con el peto en el segundo , por lo que el picador lo cuidó. Chicuelinas ajustadas de Talavante en su turno, antes de que el toro perdiera las manos, generando las protestas del brindó Urdiales a Mariano de la Viña, se sacó toreramente al toro a los medios, pero el toro perdió las manos otra vez. Abrevió el torero de Arnedo ante la flojedad del animal dejando una estocada delantera. Pitado el de Juan Pedro Domecq en el arrastre, Diego Urdiales fue silenciado.
La disposición de Alejandro Talavante no corresponde con la del malo tercero
Salió el tercero al ruedo con los ánimos caldeados, pero enseguida se estiró Alejandro Talavante de capa con delantales de recibo. Humilló y se desplazó «Trastesdor» que fue protestado por su presencia pero era el mejor presentado hasta el momento. Lo cuidó Talavante en varas y saludó Jesús Díez «Fini» en banderillas. Brindó Talavante al público maño y comenzó su faena en el tercio por estatuarios y pases por la espalda. Siguió Talavante con la mano derecha, templado, pero el toro empezó a tardear y llegó a perder las manos. No humillaba el de Juan Pedro ni tenía finales, pero la izquierda del torero pacense lo enceló, logrando una tanda más que estimable. Lo apretó Talavante en la segunda tanda al natural pero el toro no tenía bien final, desluciendo los muletazos. No respondió el toro a la buena disposición del torero. Dejó media estocada muy baja y tomó el descabello errando al primer golpe, salteando el arma al callejón. Acertó a la segunda. Pitos para el toro de Juan Pedro Domecq y silencio para Alejandro Talavante.
Excelsa obra de Morante de la Puebla al cuarto al que le pasea una oreja
Se regó el ruedo antes de la salida del cuarto de la tarde, nunca hecho en esta feria, y salió al ruedo «Instigador» con un peso de media tonelada y de pelo negro, al que sin preámbulos paró Morante de la Puebla estirándose a la verónica. Blandeó el toro y surgieron leves protestas. Galleó Morante con medio capote pero después de empujar el toro en el peto, se fue al suelo el animal y surgieron más protestas, pero la presidencia aguantó al toro. Expuso Juan José Trujillo en el tercer par. Torerísimo el comienzo de faena de Morante con ayudados por alto, sacándose al toro a los medios. Gran tanda por el lado derecho, con desparpajo a un noble toro, que también humilló por el lado izquierdo, pero cuando Morante le bajó la mano el toro las perdió. Volvió a la diestra donde dibujó el de la Puebla muletazos profundos, con el cuerpo encajado y mentón hundido. Volvió a la zurda con un afarolado, y recetó templadísimos naturales de frente, de uno en uno. Un sublime derechazo precedió a otra buena tanda de derechazos, llena de gracia y torería, y otra más ya con el acero en la mano. Respondió el toro con calidad. Dejó una estocada tendida entre el júbilo del público y los tendidos se llenaron de pañuelos, pidiendo el trofeo que concedió el palco, habiendo división de opiniones para el toro en el arrastre
Diego Urdiales no se amedrenta y sublima una gran obra al quinto al que le corta una oreja
El quinto también estaba muy en tipo y en hechuras de la ganadería. Con 494 kilos y buena hechura, bajo y cornidelantero, este «Zahonado» dejó torear a la verónica a Diego Urdiales. No le dieron al toro en el caballo donde galleó Urdiales entre puyazos y después quitó Talavante por gaoneras. Brindis de Diego Urdiales antes de comenzar su faena con pases por alto, por bajo abriendo el compás y un torerísimo molinete. Después de una buena tanda de derechazos vino otra mejor antes de ponerse a zurdas por dónde también recetó naturales de bellísimo trazo el torero riojano. Mejores aún fueron los siguientes, cogiendo el estaquillador por el centro y citando dando el pecho. Después de tanta profundidad pedía sitio el toro, y se lo dió Urdiales, para la mejor tanda de la gran faena que realizó. Con la plaza en pié se fue a por el acero. También tuvo calidad el toro de Juan Pedro Domecq. Torerísimo cierre de faena de Diego Urdiales que dejó una gran estocada después de un pinchazo mientras sonaba el aviso, cayendo en sus manos la segunda oreja de la tarde. Ovación para el toro de Juan Pedro Domecq.
Talavante abrevia con el nulo sexto
Tenía cuajo el sexto, «Jarcio» de nombre y también cornidelantero, con el que se estiró Talavante a la verónica. Se dejó pegar el de Juan Pedro sin apretar. Comenzó por alto Talavante su faena al sexto, y ya en los medios se puso con la mano derecha. Era brusco el toro y tenía un viaje muy corto. Después empezó a embestir a saltitos sin rebrincarse, tirando gañafones a la franela de Talavante, que abrevió. Dejó una estocada corta. Acertó con el verduguillo y fue silenciado, mientras hubo pitos para el toro de Juan Pedro Domecq.
FICHA DEL FESTEJO
Coso de la Misericordia, Zaragoza. Feria de El Pilar. Corrida de toros. Novena de abono. Lleno de ‘No hay localidades’
Toros de Juan Pedro Domecq, justos de presentación y de juego desigual. Soso y muy a menos el primero; Flojísimo y a menos el segundo; Sin clase el tercero; Noble y a más el cuarto; Con calidad y a más el quinto; Parado y sin clase el sexto.
Morante de la Puebla: Silencio y oreja
Diego Urdiales: Silencio y oreja
Alejandro Talavante: Silencio y silencio
INCIDENCIAS: Se desmonteró Jesús Díez ‘Fini’ en el tercero de la tarde.
FOTOGALERÍA: ZÚÑIGA Y TOROS
