En varios puntos de la geografía española existen fincas escondidas que pocos aficionados conocen, lugares donde habita el toro bravo, un animal que protege su territorio aunque le cueste la vida y que son su simple presencia causa intimidación y respeto a todo viandante que se cruza con él por cualquier camino junto a su cercado. Fuera de las grandes casas ganaderas que copan las ferias y los carteles más importantes de las mismas, hay hierros que sigue luchando por no desaparecer en un mundo tan voraz y competitivo.
Pese a luchar como gato panza arriba contra viento y marea, hay muchas explotaciones ganaderas que por distintas razones han decidido poner a la venta la citada explotación. Este es el caso de parte de la familia Gavira (Juan Antonio y Almoraima), los cuales son propietarios de la finca Soto de Roma, de unas 200 hectáreas y situada en la zona baja del parque natural de los Alcornocales, presentando esta la mayor masa de alcornoque de la Península Ibérica.
Con la salida a la venta de esta emblemática finca, era importante saber cuál iba a ser el destino de los animales bravos que pastan en la misma, por ello este medio quiso ponerse en contacto con Juan Antonio, dueño actualmente de la vacada gaditana: “No tengo intención de vender la ganadería, pero si hay alguna oferta interesante la vamos a escuchar”, señaló. Un hierro de enorme prestigio al que ya se le han puesto el ojo varios compradores: “Tengo que decirte que hemos recibido alguna oferta este último año, y no la hemos atendido” comentó a este medio un ganadero que nos emplazó a una posterior entrevista la semana que viene para hablar con mayor profundad sobre el momento que vive el hierro de Gavira.
Gavira, un emblema del campo bravo gaditano
Esta propiedad, que lleva tiempo a la venta, ofrece «un marco incomparable de belleza natural y funcionalidad», narra ésta. «A tan solo 30 min de Sotogrande, la finca combina lo mejor de ambos mundos: la tranquilidad del campo y la proximidad a zonas urbanas de prestigio», se explicitaba en esta publicación alojada en la web Crops Capital, encargada también esta de la gestión de la venta. Una finca que da cobijo a una de las vacadas de bravo más emblemáticas de nuestra piel de toro, una explotación ganadera donde pastan los machos y las hembras marcados a fuego con el hierro de Gavira.
Se trata de una finca que ha salido a la venta por un precio de 4.800.000 €, y que cuenta 200 hectáreas de pastos y dehesa, además de todas las instalaciones necesarias para el manejo y cuidado del ganado. Como es habitual en este tipo de explotaciones, ésta está perimetralmente vallada con diversos cercados separando a los animales por sexo y edad. Amén de un número importante de cercados, Soto de Roma posee una plaza de tientas con varios corrales y un embarcadero.
Como también se hace constar en dicho anuncio, «dentro del perímetro de la finca se encuentra un espectacular cortijo de estilo andaluz con una superficie construida de 1.000 m². Una vivienda que destaca por su patio interior cerrado, una torre sobresaliente y amplios salones. Con 3 habitaciones y 4 baños, cocina completamente equipada y zona exterior ajardinada el cortijo ofrece todas las comodidades necesarias para una vida plácida y elegante».
Cabe destacar que la propiedad dispone de un suministro de agua suficiente tanto para la actividad ganadera como para la vivienda, gracias a un pozo de sondeo y a un río que pasa por el linde, algo que unido a la pluviometría anual hace de esta finca un lugar ideal para el asentamiento de ganado. Otro factor importante son tanto sus comunicaciones como el acceso a la misma. Situada muy cerca de Los Barrios, tiene a su lado Algeciras, a poco más de 50 minutos Jerez de la Frontera y a menos de dos horas Sevilla.