Muy atractivo resultaba el duelo joven que planteaba la cubierta de Alba de Tormes en este 24 de abril, con un Alejandro Marcos en estado de gracia y un Tomás Rufo arrasador desde que tomase la alternativa el pasado septiembre. En chiqueros, la segurida de contar con el hierro de Garcigrande para el toreo de los dos jóvenes.
Faena muy templada con un toro de Garcigrande con clase dejó Alejandro Marcos en primer lugar. Se acopló más por el derecho Marcos ante el animal, pero marró con el acero, pinchando en dos ocasiones y dejando una estocada defectuosa a la tercera. Ovación para toro y torero.
En segundo lugar, Tomás Rufo paseó una oreja de un animal al que dejó momentos buenos por el derecho; no obstante, el toro no se terminó de entregar. Hizo un esfuerzo el toledano y le paseó el apéndice.
Templado fue el saludo capotero de Alejandro Marcos al tercero, un animal con el que destacó en las despaciosas chicuelinas del quite. Se echó de rodillas el charro para iniciar faena, dejando incluso algunos momentos también de toreo despacioso de hinojos Marcos en un prólogo de mucha exposición. Y siguió toreando al natural en una segunda serie también de rodillas que terminó poniendo en pie totalmente al tendido y haciendo sonar la música. Fue una máquina embestir el bravo de Garcigrande, que aguantó la proposición de mano baja del joven diestro por ambos lados; se llegó incluso a pedir un indulto no concedido. Remató la obra con toreo de mano baja a este «Chisposo», al que mató de una estocada ligeramente contraria Marcos. Tardó en caer el animal, y paseó dos orejas el diestro, siendo premiado el animal con la vuelta al ruedo en el arrastre.
Con un genial temple saludó Tomás Rufo al cuarto de la tarde a la verónica, animal que empujó con fuerza en la vara que tomó. Y fue bravo también el animal, que Tomás brindó al tendido y dejó series de compás y templada estética por ambos lados, mostrando la rotundidad despaciosa que ha atestiguado ya en las primeras Ferias de la temporada. Faena larga pero vibrante la del toledano ante un toro que aguantó su proposición de mano baja. Remató la obra por luquecinas y agarró una buena estocada que además fue efectiva. Dos orejas.
Excelsas fueron algunas verónicas aisladas de Marcos para recibir al quinto, especialmente la media. No lo puso fácil el animal en banderillas, poniendo en aprietos a los hombres de plata, y luego fue difícil también en la muleta del joven, saliendo con la cara alta de los envites y no humillando en sus cites. Labor de esfuerzo del joven charro. Le pegó una estocada y fue ovacionado.
No fue fácil el sexto del festejo, un animal con teclas al que tuvo que imponerse a base de entrega y tragar quina Tomás Rufo. Obra de actitud y poder. Esfuerzo importante del torero de Pepino, que pareció clavar la espada en una banderilla en el primer intento con el acero y pinchó a la segunda. A la tercera enterró el acero. Una oreja más.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Alba de Tormes (Salamanca). Corrida extraordinaria.
Seis toros de Garcigrande, de vuelta al ruedo el tercero.
Alejandro Marcos: ovación, dos orejas y ovación.
Tomás Rufo: oreja, dos orejas y oreja.