Una corrida de El Pilar se lidiaba, este miércoles, en la quinta de la Feria de Santiago de Santander. José María Manzanares, Alejandro Talavante y Tomás Rufo hacían el paseíllo.
Manzanares, sólo detalles ante el poco poder del «Potrico» primero
“Potrico” se llamaba el primero de la tarde, número 124, colorado chorreado de capa, un toro de la ganadería salmantina de “El Pilar” de 558 kg nacido en marzo de 2020. Un tanto suelto de salida, solo pudo dejarle un par de verónicas el diestro alicantino ante la embestida justa de fuerzas del animal. Sin codicia empujó en el peto de Paco María, en el único puyazo que recibió. Buenos pares de Juan José Trujillo. La escasez de fuerzas fue el preludio del inicio de faena. De mano alta fueron las primeras tandas por el derecho, ante un astado que embestía con clase pero se caía en cuanto le apretaba Manzanares. Muy venido a menos este abreplaza, optó por abreviar el alicantino. Dejó una gran estocada, pero que tardó en hacer efecto. Pitos en el arrastre. Silencio.
La falta de fuerzas del enclasado segundo también lastra la obra de Talavante
“Niñito” se llamaba el segundo, de 554 kg, colorado de capa, número 142 nacido en marzo de 2020. Se gustó Talavante a la verónica, con un bonito ramillete que cerró con una revolera marca de la casa. Tras el puyazo de Miguel Ángel Muñoz, algo justo pero efectivo, quitó por gaoneras el extremeño en los medios. Se gustó Javier Ambel con dos buenos pares. En los medios brindó al respetable Alejandro, combinando ayudados y trincherillas en el inicio de faena. También evidenció este segundo, al igual que su hermano, estar justo de fuerzas, porque lo que el diestro no lo castigo de inicio por el derecho. Al natural sí pudo soplarle algún muletazo suelto de trazo limpio y profundo, sin ligazón pero de mucho mérito. Por el izquierdo construyó toda la faena Talavante, intentando cincelar naturales profundos a pesar de la justa embestida del astado salmantino. No se dejó nada dentro el diestro, que agradeció el respetable con una sincera ovación. Dejo una estocada entera, pero caída, tras pinchazo. Pitos en el arrastre. Silencio.
La exposición y el toreo de Rufo, oreja del tercero, que sacó fondo de bravo
Otro “Niñito” salió en tercer lugar, número 25, colorado de capa, 464 kg nacido en marzo de 2020. No dio opción a estirarse la verónica a Tomás Rufo, que se limitó a domeñar su embestida con elegancia, cuidando al animal de salida. Buenos pares de Andrés Revuelta. Al público brindó el toledano. Se echó de hinojos en los medios, para soplarle una serie por el derecho de gran emoción, cerrada con tres de pecho soberbios. Por ese mismo pitón dibujó muletazos de trazo limpio pero sin ligazón, ante un astado que embestía con clase pero sin emoción ni ritmo. Lo intentó al natural, dejándole alguno suelto de calidad. Cambio de pitón y puso a todos de acuerdo con un par series ligadas, corriendo la mano con gusto aprovechando la inercia del burel, que sacó un fondo de bravura en ese par de series por el pitón derecho. Con la tizona, se tiró de verdad para dejar una gran estocada que le valió un apéndice.
Manzanares, silenciado ante el deslucido cuarto
En cuarto lugar salió “Canastero”, número 107, tostado chorreado de capa de 553 kg, nacido en marzo de 2020. Remataba de salida en tablas, sin hacer hilo en el capote del diestro alicantino, que no pudo encelarlo en ningún momento en las telas. Empujo con fuerza en el peto de Oscar Bernal, perdiendo las manos en el puyazo de castigo. Buen par de Luis Cebadera. Se echó José Mari la muleta con rapidez a la derecha, tanteando por alto al incierto cuarto. Perdió las manos el los primeros compases, donde se limitaba a pasar tras los vuelos de la muleta, sin clase ni emoción. Al natural se quedaba corto de embestida, intentándolo el alicantino de uno en uno poder rascar algo del astado salmantino. A base de oficio y predisposición consiguió el diestro algún derechazo de trazo limpio. Media estocada agarrada en el sitio, que necesito uso de un golpe de verduguillo. Silencio.
Saludos para Talavante ante el enclasado quinto, al que pincha
Un tercer “Niñito” salió en quinto lugar, número 137, colorado de capa con 576 kg nacido en abril de 2020. Un tanto frío de salida, se pudo gustar un encajado Talavante con cuatro verónicas acompasadas que cerró con una bella revolera. Buenos pares de Álvaro Montes. Al público brindó Alejandro. Por bajo y genuflexo tanteó de inicio, combinando con naturales de hombros relajados. Por ese pitón izquierdo lo vio claro el extremeño, para aprovechar la enclasada embestida del astado, que aunque un tanto brusco y trote cochinero, humillaba tras los vuelos de la muleta. Profundos y ligados fueros las naturales de una serie en la que exprimió la embestida del quinto. Por circulares se gustó en el cierre de faena. Estocada caída tras pinchazo. Saludos.
La raza y la profundidad de Rufo desorejan al cierraplaza
“Busconito” se llamaba el cierra plaza, número 65, colorado de capa con 554 kg, nacido en abril de 2020. Pudo estirarse Tomás Rufo a la verónica, en un bello saludo capotero. Empujo con fuerza y codicia en el peto de José Antonio Barroso, llevándose al caballo contra las tablas. Buenos pares de Sergio Blasco y Fernando Sánchez. Al público brindó el cierra plaza. Por la espalda y ajustado se pasó al astado en los inicios por el derecho, midiendo alturas. Al natural la faltaron ligazón y profundidad a los muletazos, siendo sueltos sin posibilidad de correr la mano. No se dejó nada el toledano, buscando muletazos en series de colocación y trazo limpio ante un astado salmantino que embestía con clase pero le faltaba fondo de bravura. Propuso una faena larga donde jugó con las zonas que le iba pidiendo el noble burel. Se tiró con todo, siendo violentamente encunado sobre los pitones en unos segundos de peligro, pero que le sirvió para desorejar al cierra plaza.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Cuatro Caminos, Santander. Quinta de la Feria de Santiago. Corrida de toros. Casi lleno.
Toros de El Pilar. De poco poder el primero; de cierta clase pero poco poder el segundo; con fondo de bravo el tercero; deslucido e incierto el cuarto, también sin fuerza; de clase el quinto;
José María Manzanares, silencio y silencio.
Alejandro Talavante, silencio y ovación.
Tomás Rufo, oreja y dos orejas.
FOTOGALERÍA: ARJONA – LANCES DE FUTURO